PAGINAS DE APOYO

Páginas

viernes, 13 de junio de 2014

LA MAYORDOMIA DE NUESTRA FAMILIA -NUESTROS ADOLESCENTES




La semana pasada estuvimos hablando de la mayordomía de nuestros niños y lo importante que es aprender a cuidar de ellos dedicandoles tiempo, siendo de ejemplo para ellos, corrigiendoles con amor y paciencia y no con gritos ni malos tratos y no exigiendoles más de lo que son capaces de dar como niños que son.
Hoy continuaremos hablando del tema de la mayordomia de nuestra familia hablando de otro tema muuy importante NUESTROS ADOLESCENTES Y JOVENES, la etapa de la adolescencia es inmediatamente despues que termina la niñez y que puede llegar a durar hasta los 18 o 20 años según la madurez que muestre cada joven o jovencita.
Recordemos que los jovenes en este tiempo se sufren cambios tanto fisicos como emocionales, y es sumamente importante que tengamos sabiduría de Dios para poder cuidar de nuestros adolescentes, ya que esta etapa es una de las mas peligrosas para la vida de toda persona, muchos jovenes han tenido una mala adolescencia y cuando han llegado a la edad adulta se han convertido en personas dificiles para la sociedad, han perdido el rumbo de sus vidas y les ha sido muy dificil volver a encausarse.
Por eso la mayordomia de nuestros jovenes es una de las mas importantes, en esta etapa nuestros jovenes tendràn algunas caracteristicas que debemos conocer para poder entenderles y comprenderles mejor:
1. Son muy activos, por lo que no deben estar ociosos sino aprovechar esa energía para que tengan un programa variado de actividades.
2. En este tiempo aumenta tambien su capacidad para razonar, aumenta su habilidad para argumentar y pensar en forma critica.
3. Están inseguros en cuanto a sus deseos, a sus sueños y que desean para el futuro.
4. Los jovenes a esta edad tienen un espiritu de aventura y les gustan los riesgos, mas si es para demostrar a otros sus habilidades o capacidades.
5. Se preocupan mucho por su apariencia externa y por el qué dirán de los demás.
6. Son muy críticos y tienden a juzgar a otros
7. Una de las mas importantes buscan reafirmar su identidad y un modelo a seguir.
8. Pueden reafirmar mas sus creencias o desecharlas por completo, este punto es sumamente importante porque muchos jóvenes logran canalizar toda su energía y capacidad volcándola hacia a Dios y otros se apartan por completo de lo que es la fe para tristeza y dolor de sus padres.

Teniendo en cuenta todas estas características de la adolescencia la palabra de Dios nos da muchos consejos para poder cuidar de nuestros jovenes y hoy hablaremos de 3:
1. AMARLES COMO PRIORIDAD: Este principio puede ser muy obvio para algunos padres, pero los niños no lo piensan asì, una de las principales causas por las cuales los adolescentes huyen de sus hogares a destruir sus vidas por la droga, o los intentos de suicidio o abandonarse y vagar, es debido a su sentimiento de que no son amados. No se trata de sobreproteger o dejarles pasar todo, se trata que les mostremos que son amados, que estamos alli para amarles y soportarles en todos sus problemas, este apoyo para ellos es sumamente importante porque vayan donde vayan, cuando no estèn a nuestro lado en el colegio, a
hacer deporte, con sus amigos, etc, siempre sentirán el respaldo nuestro cariño y un lugar seguro donde pueden volver.El libro de 1 Pedro 4:8: "Y ante todo, tened entre vosotros ferviente AMOR; porque el AMOR cubrirá multitud de faltas"

2. ENSEÑAR EL ESFUERZO Y TRABAJO: Se habla tanto en este ultimo tiempo de la generacion NI-NI que ni estudia ni trabaja, jovenes que ya son adultos y que no han sido instruidos en el esfuerzo y el trabajo, la palabra de Dios dice 22:6 Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él." Desde pequeños debemos de enseñar a nuestros niños a tener responsabilidades y mucho mas cuando son adolescentes, el adolescente tiene mucha energia pero por naturaleza es cómodo y le cuesta esforzarse cuando no se trata de algo que verdaderamente le interesa, parte de la mayordomía de nuestros jovenes es enseñarles a tener responsabilidades dentro de casa, cosas tan sencillas como hacer su cama, recoger su habitación, ayudar a fregar los platos, tirar la basura, etc. llevar un buen rendimiento en el Colegio, son tareas que debemos repetir una y otra vez cada dia, pero no nos cansemos de hacerlo porque si les damos instrucción, les enseñamos en este tiempo cuando fueren adultos, adultos mayores y aun viejos no se apartaran de esta enseñanza que un dia les dimos.

3. ESTABLEZCAMOS LÍMITES: El libro de 1ra. Corintios 10:23 dice "Todo me es lìcito pero no todo me conviene, todo me es lìcito pero no todo edifica." Cuando se trata de adolescentes debemos establecer bien los limites y las reglas tanto de su conducta, como en casa y lo que esperamos de ellos, los limites cuando son claros y se explican bien dan seguridad al joven
especialmente cuando tienen que enfrentarse a valores y costumbres diferentes a las que se practican en casa. En esta escritura dice que todo me es licito la palabra licito significa "permitido" o sea todo està permitido pero no todo nos conviene, todo está permitido pero no todo me puede edificar, para cuidar de nuestros adolescentes debemos enseñarles a evaluar y frenarse cuando algo no conviene o no edifica, es un proceso lento y repetitivo pero ellos iran conociendo los límites que deben respetar para no desbocarse.
Por ultimo algo muy importante OREMOS A SOLAS POR NUESTROS ADOLESCENTES, podemos enseñarles mucho, hablarles mucho, escucharles mucho, pero lo que realmente podrá ayudarles mucho más es nuestra oración e intercesión constante para que puedan moverse según la voluntad de Dios y hacerse adultos de bien.

viernes, 6 de junio de 2014

LA MAYORDOMIA DE NUESTRA FAMILIA- NUESTROS NIÑOS



Comenzamos hace dos semanas hablando del tema de la Mayordomía de nuestra familia, y la importancia que tiene para nuestra vida el que cuidemos de las personas que Dios ha puesto a nuestro lado, la familia es una de las cosas que no hemos podido escoger, nacemos en ella y es Dios quien nos pone allí, la buena mayordomía de nuestra familia nos ayuda a tener una vida más feliz, aprender a vivir en armonía no es solo no buscar problemas sino cuidar, amar, tener detalles y sobre todo valorar a cada uno de los miembros de nuestra familia. 
Hoy hablaremos del tema de nuestra familia pero enfocado en nuestros niños, los niños que forman parte de nuestra familia son valiosos no solo por la alegría el amor y la pureza de sentimientos que pueden despertar en nosotros, sino también porque el tiempo pasa rápido y los que ahora son niños en un futuro no muy lejano dejarán de serlo y veremos que se van convirtiendo en jóvenes y luego adultos y depende de nosotros cuánto hemos valorado este tiempo en que esos miembros de nuestra familia son niños. 
En todas las familias hay niños, pueden ser nuestros hijos, sobrinos, primos, nietos, en fin un niño es tan especial que Jesus mismo quería tenerlos cerca cuando les dijo a sus discípulos en Mateo 19:14: Pero Jesús dijo: "Dejad a los NIÑOS venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos", Jesús nos dio el primer ejemplo de amor por los niños, muchas veces cuando tratamos con nuestros niños en la familia les vemos como esas personas pequeñas a las que tenemos mucho que enseñarles, corregirles, disciplinarles, pero también debemos verles como aquellas personas de las que podemos aprender, aprender de su sencillez, de su inocencia, de su alegría, su sinceridad y su capacidad de dar amor y perdón. Los niños muchas veces son excesivamente expresivos, alegres, inquietos, algunos son nerviosos, activos y rebeldes, pero podemos aprender a cuidar de ellos no solo para enseñarles a ser personas de bien sino también cuidarles siendo buenos mayordomos de ellos durante el tiempo que sean niños, porque hay una verdad muy grande LO NIÑOS NO SIEMPRE SERAN NIÑOS 
Hoy vamos a ver 4 consejos que la palabra de Dios nos da acerca de còmo podemos ser buenos mayordomos de nuestros niños y lo mucho que podemos aprender de ellos. 
  1. NO ESPEREMOS DE ELLOS MAS DE LO QUE PUEDEN DAR  En el libro de 1ra. Corintios 13:11. Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño. De alguna manera esta escritura nos deja ver que los niños, son eso, niños, muchas veces queremos tener adultos pequeños, que sean responsables, educados, disciplinados, comprensivos, callados, ordenados y muchas cosas mas, que algunas veces ni nosotros mismos podemos dar la talla, sin embargo eso no quiere decir que con la excusa de que son niños les permitamos hacer lo que quieran, parte de la mayordomía de nuestros niños es saber cuando corregir y cuando parar para que puedan ser niños felices y también niños conforme a lo que Dios quiere que sean, la etapa de la infancia o niñez es una de las mas preciosas que vivimos en la vida, pero somos esponjas que recibimos todo lo que nos dan, bueno o malo, amor o falta de amor, por eso es importante que enseñemos todo el tiempo a nuestros niños, pero no esperemos de ellos más de lo que realmente son capaces de dar, ahora que son niños harás cosas de niños y con sabiduría de Dios y amor podremos encausarles para que sean adultos de bendición cuando ese tiempo llegue. 
  1. CUIDEMOS COMO CORREGIMOS Y REPRENDEMOS: Es innegable que un niño necesita mucho que aprender, mucho que corregir, mucho que esforzarse para llegar a ser un hombre o una mujer de bien, pero es muy importante en todo este proceso el trato que recibe por parte de nosotros los adultos, parte de ser un buen mayordomo de un niño es cuidar la forma en cómo les tratamos, cómo les corregimos y reprendemos.  En el libro de Efesios 4:31 dice "Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia." debemos de quitar de nosotros el corregir con amargura, con ira, gritando, maldiciendo, maldecir es decir mal a otra persona y hablarle mal, el gritar no va a hacer que un niño entienda mejor las cosas o las haga mejor, el gritar solo abre la puerta a la ira, a la amargura y lo peor a crear un ambiente de violencia y mal trato en el que ningun niño es justo que viva. 
  1. SEAMOS EJEMPLO:  Hay frases acerca de ser ejemplo como el que "las palabras convencen pero el ejemplo arrastra, que un hecho vale mas que mil palabras", pero esto es mas importante de lo que creemos cuando se trata de enseñar a un niño, los niños como dije antes, son esponjas, que van a recibir tanto lo bueno como lo malo que podamos darles. En el libro de 1ra. Corintios 11:1 dice "Sed imitadores de mi, como yo soy de Cristo", la mejor forma en que podemos enseñar a un niño es siendo ejemplo, si nuestro caminar es de acuerdo al de la palabra de Dios, el niño podrá imitarnos porque somos imitadores de Cristo nosotros mismos, para poder ser buenos mayordomos de nuestros niños y cuidar bien de esa tierra limpia y fresca que Dios nos da, debemos ser ejemplo, cuidemos mucho nuestra forma de hablar, de responder, cómo actuamos, de qué o de quién hablamos, cuáles son nuestras reacciones ante situaciones adversas, ellos son como una videograbadora que van grabando todo lo que ven de nosotros y cuando menos lo esperemos ellos reproducirán lo que han aprendido de nosotros.  
  1. BUSQUEMOS TIEMPOS GRATOS CON NUESTROS NIÑOS: Creo que todo adulto que recuerda su niñez debería hacerlo con una sonrisa, una sonrisa que significa que ha vivido tiempos felices, gratos, llenos de alegría en los que no importa si tiene mucho o poco sino la calidad del tiempo vivido.  Es muuy importante que busquemos pasar tiempos bonitos y gratos con nuestros niños, pensemos siempre que ahora son niños pero el tiempo pasa rápido y dejarán de serlo y ya no podremos jugar con ellos de la misma manera que lo haríamos cuando son pequeños.  La experiencia que hace algunas semanas les conté acerca de nuestro hijo pequeño que se fue con El Señor hace unos años nos enseñó como padres que debemos aprender a disfrutar de nuestros hijos, a tener tiempo de calidad, a jugar con ellos, interesarnos en su mundo, en sus cosas, disfrutar de su niñez, serán tiempos inolvidables para nosotros pero más lo será para ellos. El  Salmo 133:1: ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en ARMONÍA! porque alli envia Jehová bendición y vida eterna." este versiculo se cumple no solo cuando estamos con los hermanos de la iglesia sino cuando estamos con esos pequeñitos que Dios ha puesto cerca nuestro, en esos tiempos de comunión El Señor envía bendición y vida eterna, no debemos desaprovecharlos.  
Aprendamos a ser buenos mayordomos de nuestros niños: 
  1. No esperemos mas de lo que son capaces de dar 
  1. Cuidemos como corregimos y reprendemos 
  1. Seamos ejemplo 
  1. Y busquemos pasar tiempos gratos con ellos. 
La proxima semana seguimos hablando de la mayordomia de nuestra familia.