Cantares 2:2
Eres un lirio o un espino???
La palabra de Dios se refiere a dos tipos de vegetación totalmente diferentes sembradas en una misma tierra, las dos fueron semillas y las dos tuvieron el mismo tipo de luz y agua, la diferencia está en la calidad de cada una de ellas, una produjo espinos y la otra produjo un lirio.
En la palabra de Dios los espinos simbolizan muchas cosas, por ejemplo:
PECADO Y DESOBEDIENCIA: La primera vez la palabra espinos se menciona en el libro de Génesis 3:18, diciendo que la tierra produciría "espinos y cardos" como una de las consecuencias de pecar, desobedecer y apartarse de Dios. Una de las consecuencias de la desobediencia es la producción de espinos en nosotros, esas ramas que no permiten que haya vida, que pinchan a los demás y que hacen que muera el fruto en nosotros.
RECHAZO: Más adelante en el libro de Samuel 23:6 habla de los espinos como una señal de rechazo, cuando hay maldad en el corazón nadie quiere estar cerca de nosotros. "Mas los impíos serán todos ellos como ESPINOS arrancados, Los cuales nadie toma con la mano". Un espino duele al tocarlo y una vez experimentado el dolor nadie quiere tomarlos en su mano.
SOLEDAD, AISLAMIENTO Y NEGLIGENCIA: Los espinos también en la Bíblia simbolizan una barrera que nos aísla de los demás trayendo soledad a nuestra vida. También simbolizan la pereza, la falta de diligencia en las cosas. Proverbios 15:19 dice "El camino del perezoso es como seto de ESPINOS; Mas la vereda de los rectos, como una calzada." Un "seto" de espinos es una barrera que se hace de ramas o arbustos para aislar ciertas áreas de cultivo y que nadie pueda pasar. Así mismo la pereza y la falta de diligencia llegan a traer aislamiento y soledad a nuestra vida por nuestra falta de esfuerzo.
SEQUIA ESPIRITUAL: El libro de Isaías 5:6 dice "Haré que quede desierta; no será podada ni cavada, y crecerán el cardo y los ESPINOS; y aun a las nubes mandaré que no derramen lluvia sobre ella." Los espinos crecen en terrenos secos y áridos donde la lluvia no desciende, una tierra húmeda por el rocío y la lluvia no permite que los espinos crezcan y permanezcan porque se morirían y no harían mas daño al ablandarse, los espinos también simbolizan esa sequedad interior en el corazón, cuando no hay agua de vida para dar a los demás y para saciarnos nosotros mismo, la palabra dice que El Señor nos da agua de vida para que no tengamos sed jamás, una vida seca y árida produce espinos.
MUNDANALIDAD Y VANIDAD: La palabra de Dios habla también de los espinos para simbolizar el mundo y la vanidad que puede entrar al corazón de una persona y ahogar la palabra de Dios en ella "La que cayó entre ESPINOS, éstos son los que oyen, pero yéndose, son ahogados por los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan fruto." Lucas 8:14, en este versículo el sembrador salió sembrar semillas todas eran iguales pero las que cayeron entre espinos se ahogaron y no llevaron fruto. Cuando permitimos que los afanes de este mundo entren en nuestro corazón, los placeres de la vida, la ansiedad de las cosas materiales tomen el control y llenen nuestra alma y corazón, la palabra de Dios se ahora enseguida y no permite que crezcamos, mucho enos que demos fruto.
Aprendiendo esto podemos preguntar... Si eres una mujer de Dios, eres ESPINO O LIRIO? Los lirios son plantas sembradas en lugares en los que la humedad llega a su raíz y produce flores de diversos colores, un lirio es una planta muy agradecida, no necesita mayores cuidados, no es sumamente delicada pero su belleza es absoluta.
Eres LIRIO O ESPINO?
Saquemos de nosotros los espinos como: Desobediencia, pecado, negligencia, pereza, impiedad e indiferencia y mundanalidad y vanidad, una mujer que tiene una de estás características en su vida no puede ser un lirio.
Elijamos ser LIRIOS que florecen con el agua de vida de Jesucristo en nosotros, LIRIOS que destacan por la sencillez, no seamos complicadas y obstinadas, LIRIOS que embellecen los lugares con nuestro aroma de obediencia, de santidad, de entendimiento y de humildad.
Mujer de Dios elige ser un LIRIO
entre tantos espinos que abundan en nuestro alrededor.