"Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza"
Hebreos 6:11
Existen 3 formas de saber las cosas: Con incertidumbre, con riesgo o con certeza. La incertidumbre es cuando no conocemos algo con seguridad y desconocemos si es cierto, ya que hay dudas y no está resuelto, por ejemplo ¿Qué pasará mañana? Quiénes serán los próximos gobernantes? Dónde estaremos dentro de cinco o diez años? Luego también podemos vivir en el riesgo, que es cuando tenemos posibilidades que cosas buenas o malas puedan sucedernos como por ejemplo: ¿Ganaremos un partido o una carrera? ¿Pasarán nuestros hijos de curso? ¿Si viajo a determinado lugar cómo será? Y también podemos vivir con CERTEZA.
La certeza es tener la conciencia que sabemos y conocemos algo verdadero, estamos seguros y claros de algo y no tenemos lugar a dudas. La palabra certeza se deriva de cierto, que viene del latín CERTUS que significa decidido, resuelto o preciso, la certeza no es solamente saber la verdad sino estar plenamente conscientes que poseemos la verdad. Saber las cosas con certeza es saberlas con convicción, con seguridad y con claridad que es algo verdadero, real y que ciertamente sucederá.
La palabra de Dios nos habla de tener PLENA CERTEZA de la esperanza. Esto significa vivir PLENAMENTE CONVENCIDOS, CONFIADOS, CIERTOS, SEGUROS Y DECIDIDOS que nuestra esperanza de Gloria Jesucristo cumplirá sus promesas en nosotros e intervendrá para que las cosas sucedan.
David estaba plenamente convencido y tenía la certeza que derrotaría al gigante Goliat, Daniel estaba plenamente seguro y con toda la certeza que Dios haría algo si entraba en el foso de los leones, Ester estaba plenamente confiada en que a través del ayuno y la oración de su pueblo Dios la respaldaría ante el rey y lograría librar a su pueblo y el mismo Jesús tenia la PLENA CERTEZA que el Padre no le abandonaría sino que después de ser vituperado, humillado, golpeado, muerto y dejado en una sepultura Dios le levantaría de entre los muertos, le pondría a la diestra del Padre y pondría a sus enemigos por estrado de sus pies.
Tienes certezas del poder de Dios en tu corazón?? Como hijos de Dios debemos vivir esta PLENA CERTEZA, emprender cualquier cosa por mínima que sea poniéndola en manos de Dios y tener la certeza que El nos respaldará y nos ayudará a alcanzar nuestras metas, debemos vivir sin dudas, sin temores, sin incredulidad en el corazón, sabiendo que tenemos un Dios fiel, santo, justo y bueno, que está velando por nosotros día y noche y no permitirá que para siempre seamos avergonzados, que no permitirá que seamos destruidos y que nos llevará de victoria en victoria!
Dejemos de vivir en incertidumbre y en dudas acerca de nuestro futuro, no vivamos presos del temor porque no conocemos qué pasará con nosotros, creamos a Dios, creamos en sus promesas, busquémosle en todo momento y en todo lugar, recibamos su dirección y avancemos en Su fuerza y en Su gracia para alcanzar aquello que deseamos porque si El está con nosotros nada nos podrá hacer frente y en su fuerza haremos grandes proezas.
Hagamos viva esa frase que dice:
"No es quien tu seas, es con quién vas..."