"Ahora, pues, Israel, ¿qué pide El Señor tu Dios de ti,
sino que...
andes en todos sus caminos"
Deuteronomio 10:12
"La vida es un camino. Una imagen que inmediatamente nos permite lanzar asociaciones. Tiene centro y márgenes, las cunetas en que a veces caes y otras descansas. Compañeros de marcha. Bifurcaciones. Atajos. Senderos cerrados. Tropiezos. Acelerones. Te pierdes en algunas ocasiones. Puedes pasar alguna temporada yendo solo. En otras ocasiones vas acompañado. Y Dios, también en el camino. Pero hay una enseñanza básica que uno va aprendiendo a lo largo de su historia: «No se pueden recorrer todos los caminos». Lo interesante es que elegir significa también renunciar. "Pep Montes
Andar en los caminos del Señor significa muchas veces renunciar a otros caminos, renunciar a caminos que el mundo nos ofrece y que pueden apartarnos de Su perfecta voluntad, recordemos que la palabra de Dios dice que los caminos del Señor son son rectos, angostos, son santos, son justos y más altos que nuestros caminos.
La escritura en el libro de Miqueas dice que El Señor pide de nosotros que andemos en TODOS SUS CAMINOS, esto nos lleva a pensar que debemos de andar en los caminos del Señor sin perdernos tras nuestros propios intereses y deseos, pero también al mencionar "todos sus caminos" es porque al caminar en El Señor no siempre los caminos van a ser gratos y no podemos querer caminar con El Señor solamente durante los tiempos de paz, bendición, abundancia y alegría. También debemos permanecer en sus caminos cuando se tornen adversos, difíciles, con escasez, cargas y preocupaciones.
Andar en los caminos de Dios no es la opción más fácil pero si la correcta y la única segura, andar en sus caminos nos llevará a amarle más cada día, nos apartará de desviarnos y de ir tras nuestros deseos. Andar en todos sus caminos es caminar en Su voluntad sin desear ir en otro camino porque parece más atractivo a nuestros ojos, pero quizás su fin es de muerte.
Un día tendremos todas las respuestas a nuestras preguntas, un día estaremos ante Su presencia y el nos mostrará todos los caminos que hayamos recorrido y cómo SU mano nos libró, nos encaminó, nos enderezó, nos fortaleció y nos ayudó a terminar cada camino que recorrimos con Él.
Es verdad que no se pueden recorrer todos los caminos del mundo y de esta vida, pero si podemos entregar nuestra voluntad al Señor para que nosotros andemos en todos sus caminos y bajo Su protección y dirección que siempre nos llevará a puerto seguro!
Señor guía mis pasos, que todos mis caminos sean tus caminos, no quiero apartarme de tu voluntad, no puedo recorrer todos los caminos que me ofrecen pero si quiero que tu seas mi Señor en cada camino que recorra y que siempre tu mano me guíe, me aconseje, me dirija y me lleve en el centro de tu perfecta voluntad. Amén!!!