CON TODO...

"Y he aquí un intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna?... Aquél, respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo."

Lucas 10:25-27

Vivir una eternidad con Jesús es el anhelo de cada corazón que ama al Señor y quiere hacer viva su palabra. Esa eternidad en la que el cielo y la tierra son nuevos, donde Dios enjugará toda lágrima y ya no habrá muerte, ni llanto, ni clamor, ni dolor como dice en el libro de Apocalipsis capitulo 21.

Qué debemos hacer para alcanzar esta vida eterna? La palabra de Dios dice en este pasaje de la escritura un resumen de 5 cosas que debemos hacer para alcanzarla:

AMAR AL SEÑOR TU DIOS CON TODO TU CORAZÓN: Porque de él mana la vida, porque es mas engañoso que todas las cosas, porque con el corazón se cree, por eso debemos amar al Señor con todo nuestro corazón.

AMAR AL SEÑOR CON TODA TU ALMA: Porque en el alma están todas nuestras emociones y sentimientos, porque el alma es donde está nuestra voluntad para decidir amar al Señor con nuestro libre albedrío, con nuestra alma podemos elegir, por eso debemos amar al Señor con toda nuestra alma.

AMAR AL SEÑOR CON TODAS TU FUERZAS: Para Dios nuestras fuerzas son debilidades entregadas a él, porque dice Su palabra que cuando somos débiles entonces somos fuertes,  solo El es el único que puede dar fuerza al cansado y multiplicar fuerzas a quien no tiene ninguna, con todas nuestras fuerzas debemos amar a Dios, dando lo mejor de nosotros a El, nuestro esfuerzo, nuestro trabajo, todo lo que podemos hacer y está en nuestra mano es para El.

AMAR AL SEÑOR CON TODA TU MENTE: Con nuestra mente porque allí están nuestros pensamientos, memoria y la razón. Nuestra mente debe ser toda para El Señor para que no hayan pensamientos, razones o argumentos que nos aparten de Su camino y de Su verdad.

AMAR AL PRÓJIMO COMO A TI MISMO: Amar a nuestro prójimo como a nosotros mismo con un amor sincero, verdadero, buscando su bienestar, considerándolo superior a nosotros mismos, con humildad y sencillez de corazón, haciendo por mi prójimo lo que yo quisiera que hicieran por mi.

Para alcanzar la vida eterna debemos amar al Señor con todo y a nuestro prójimo como a nosotros mismo, esforcémonos cada día para que podamos ver ese cielo y tierra nueva que El Señor nos ha prometido que veremos.

ORACIÓN: Señor entregamos a ti nuestro corazón, alma, fuerzas y nuestra mente, todo lo entregamos a ti para que Tu seas rey sobre nosotros y no haya nada que nos aparte de ti, queremos pedirte que nos des amor para nuestro prójimo, para entender, comprender, cuidar y servir a otros como tu lo haces con nosotros, Señor anhelamos alcanzar la vida eterna y pasar una eternidad juntamente contigo. Amén!