sábado, 16 de julio de 2016

DONDE TIENES TU MIRADA?



" teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón."

Hebreos 11:26


Un galardón es un premio que generalmente se concede a alguien por sus méritos, por haber prestado algún servicio o hacer cosas realmente extraordinarias. Por ejemplo el Premio Nobel es un galardón internacional que se otorga anualmente para reconocer a personas o instituciones que hayan llevado a cabo investigaciones, descubrimientos o contribuciones notables a la humanidad.  Estos premios se entregan cada año, cada persona premiada recibe una medalla de oro, un diploma y una suma de dinero.

La palabra de Dios dice que también nosotros recibiremos un galardón cuando estemos en gloria con El, y a eso se refiere la escritura en el libro de Hebreos, Moises no tuvo por mayores las riquezas que había disfrutado en Egipto sino que escogió el vituperio, porque no tenía puesta su mirada en lo que estaba a su alrededor, sino en el galardón.  La palabra Vituperio significa recibir con mucha dureza una censura o una desaprobación por parte de alguien, en este caso Moises prefirió ser avergonzado y desaprobado por los egipcios, antes que volver a ellos y dejar a su pueblo.

No es fácil recibir el vituperio de los demás, ser vituperado es en muchos momentos de la vida una forma en la que es probado nuestro orgullo y la altivez mengua en nuestro interior, porque escogemos el camino estrecho y no el ancho, todo depende de dónde tenemos puesta nuestra mirada.  Si nuestra mirada está puesta en lo terrenal, tendremos muchos problemas y pasaremos vergüenza sino estamos a la altura o no damos la talla de lo que este mundo pide que seamos, viviremos pendientes de complacer a todos antes que a Cristo y buscaremos la forma de agradar a los demás, aún por encima de lo que nosotros creemos o vivimos.   

¿Dónde tienes puesta tu mirada hoy? Hay muchas cosas alrededor de nosotros que quieren quitar nuestra mirada del Señor, pruebas, tragedias, maldad en los hombres, enfermedades, angustias, cosas inexplicables que quieren distraer nuestra mirada de Jesús nuestro mayor galardón. También hay cosas materiales, personas, amistades y situaciones que también quitan nuestra mirada del Señor, pero hoy Dios nos habla en su palabra que escojamos el vituperio de Cristo, así como lo hicieron los grandes hombres de fe, quitando nuestra mirada de lo terreral y poniendo nuestra mirada en lo eterno, que es lo que realmente permanecerá para siempre, todo lo demás desaparecerá.

Es tiempo que comencemos a vivir una vida más cerca del Señor y más lejos de lo que este mundo nos ofrece, no podemos vivir  pensando que estaremos en esta tierra eternamente, porque estamos de paso y nuestra mirada debe estar puesta allí. Que no se entristezca tu corazón si día a día sufres injusticia, eres vituperado, no tienes reconocimientos, ni grandes aprobaciones, si no tienes todo lo que quisieras y siempre estás siendo probado, porque tu mirada debe estar puesta en el galardón, allí en la eternidad donde el Padre nos espera y reinaremos juntamente con El.

El vituperio  que hoy vivimos no se puede comparar con nuestro galardón eterno, yo escojo el eterno y tu?

ORACIÓN: Señor este día ponemos nuestra mirada en ti y te pedimos que quites nuestros ojos de todas esas cosas que nos apartan de tu voluntad, de todo lo que no nos deja estar cerca de ti y hacer vida tu palabra. Hoy quiero Señor poner mi mirada en lo eterno, no importando la vergüenza, el vituperio o el rechazo de otros, quiero dejar de complacer a los demás y dejar de buscar su aprobación, quiero solamente agradarte a ti y poner mi mirada en el galardón, donde tu me esperas y donde por la fe sé que un día llegaré. Amén!