"Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová."
Josué 24:15
Yo y mi casa... Cuántas veces cuando eramos pequeños y ahora a nuestros propios hijos les hemos corregido cuando anteponen el yo a otra persona, diciéndoles que no es correcto ponerse uno por delante, sino que lo correcto es poner a los otros primero y luego nosotros, es cuestión de educación, solemos decir. Pero en este pasaje Josué reúne a todas las tribus de Israel, sus príncipes, jueces y oficiales, les da una palabra de parte de Jehová y luego les hace una aclaración diciéndoles PERO YO Y MI CASA SERVIREMOS A JEHOVA".
Siempre ha llamado mi atención el que Josué no dice mi casa y yo, sino dice YO y mi casa, porque Josué quería ir primero, diciendo YO serviré al Señor, seré de ejemplo, YO SERÉ EL PRIMERO, en esforzarme, en hacer lo mejor, seré el primero en agradar al Señor con mi vida y con mis actos y mi casa también, que incluye mi mujer, mis hijos, mis criados, todos los que formamos mi casa, serviremos al Señor, pero yo me pongo adelante.
Cuando anhelamos más de Jesús en nosotros debemos preguntarnos ¿Cómo está nuestra casa? ¿Somos ejemplo? Vamos primero que nadie? Servimos al Señor con todo el corazón?
Sería grandioso que la actitud de cada miembro de la familia fuera YO y mi casa, cada uno haciendo su trabajo, haciendo su función como padres, haciendo su función como hijos, como esposo y como esposa, dando el mayor ejemplo de amor primeramente a Dios y luego a nuestro prójimo, siendo los primeros en orar, en buscar de Dios, los primeros en leer, escudriñar y meditar en la palabra, los primeros en trabajar para Dios en lo que haga falta, los primeros para estar al frente de batalla haciendo un vallado de oración alrededor de quienes amamos, los primeros en dar un consejo, los primeros en servir y bendecir a otros, siempre diciendo Yo y mi casa.
Ser ejemplo no es una tarea fácil, ya que la palabra ejemplo significa ser un modelo o una referencia para seguir y querer ser como aquella persona o un mal ejemplo que debemos evitar.
Cuando anhelamos más de Jesús en nosotros es importante que examinemos nuestros corazones para ver si estamos siendo de ejemplo como lo fue Jesús.
Jesus fue ejemplo siendo el primero: 1 Juan 4:19 dice "Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero." Jesús nos amó primero, el nos dio el mayor ejemplo de amor dando su vida por nosotros.
Jesús fue ejemplo en el sufrimiento: 1 Pedro 2:21 dice " porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas". Jesús nos dio ejemplo en los padecimientos y en el sufrimientos, su vida fue entregada totalmente por nosotros, vivió aflicciones y sufrió por causa nuestra. La vida de Jesús no fue una vida cómoda, llena de triunfos y éxitos. El vino a padecer, al renunciar a su gloria en los cielos y hacerse como uno de nosotros, nos dio el mayor ejemplo de lo que es renunciar a sí mismo y padecer por los demás.
Que nuestra oración hoy sea:
Yo y mi casa serviremos al Señor, seré ejemplo para otros, como lo fue Jesús, dame la gracia Señor para ser siempre ejemplo a mis hijos, familia, amigos, hermanos en la fe, que yo sea el primero en el servicio, en el amor, en la compasión y en cada cosa que tu me has enseñado. Clamamos hoy Señor por el mes de marzo 2019 toma tu el control de todo lo que vamos a vivir en este mes te entregamos cada segundo de este mes del año y que tu mano no se aparte de nosotros, llénanos de ti a cada momento y que tu voluntad perfecta sea hecha en nuestras vidas siempre, en el nombre de Jesús amén!