Cambio de sentido…
Los tiempos de Dios son perfectos!
Mueve, quita y pone situaciones, circunstancias, cosas y personas de maneras que nuestro entendimiento humano no puede comprender completamente.
Realiza conexiones, abre caminos, allana montañas y levanta valles, quita obstáculos o levanta muros, para que sus hijos, sus escogidos puedan recibir aquello que Él tiene preparado.
Algunas veces son caminos largos, que duran meses o quizás años y otros caminos que duran semanas o pocos días y luego hay un cambio de sentido.
Los cambios de sentido en la voluntad de Dios son perfectos, son justos, son siempre a tiempo.
Si pudiéramos ver cuántas cosas se mueven alrededor, para que todo coincida, para que todo suceda en el momento justo, nos sorprenderíamos al ver la precisión de los planes de Dios.
Esos cambios de sentido casi siempre son inesperados, porque El Señor sabe que tendemos a aferrar el corazón, Él sabe que somos más de bajar anclas, que de navegar en mar abierto, Él nos conoce perfectamente.
Cada cambio de sentido abre ante nuestros ojos un universo de oportunidades, posibilidades, nuevos comienzos, nuevas conexiones, vientos nuevos, nueva unción.
Si Dios es el que guía nuestra vida, estemos confiados y seguros que en medio de la rutina o en cada cambio de sentido, esperado o inesperado, Su presencia nos acompaña, nos ama, nos sostiene porque Él siempre nos llevará a puerto seguro!
“Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.” Salmo 143:10