"Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros."
Romanos 8:11
El mismo Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos vive en mi! Es una declaración suficiente para pensar que para los que estamos en Cristo Jesús todo es posible. Ese poder que permitió traer vida en medio de la muerte, luz en medio de tinieblas, esperanza en medio de la tristeza, ese espíritu está en nosotros para vivificar nuestro cuerpo porque Él mora en nosotros.
Hoy tenemos la certeza, la convicción, la seguridad que la victoria de Cristo Jesús sobre la muerte, es también mi victoria, Jesús arrebató las llaves de la muerte y del Hades y vive por los siglos de los siglos.
El poder de Dios es inigualable e incomparable, no tiene límites, no tiene tiempo, no tiene fin, Su poder permitió que Jesús no permaneciera muerto sino que resucitó y vive por la eternidad, su poder mora en nosotros y dice la palabra de Dios que nos vivificará.
Vivificar es dar vida, vitalidad, fuerza, reanimar, confortar, renovar a alguien que está débil y sin fuerzas, eso hmuerte poder de Dios en nosotros, nos conforta y renueva, nos llena de vida, nos da ánimo y esperanza para seguir adelante, ese poder maravilloso que levantó a Jesús de la muerte vive en ti y en mi, no podemos dejarnos vencer, no podemos permanecer deprimidos o tristes, no podemos permitir que la falta de fe y la falta de fuerzas se apoderen de nuestros corazones, porque El ha prometido que Su poder mora en nosotros y VIVIFICARÁ nuestros cuerpos.
Hoy levanta tu corazón y tu alma al Señor, pide con todo tu corazón que su poder que está en ti, ese poder que levantó a Jesús, vivifique tu espíritu trayendo nueva vida, nuevas fuerzas, ánimo, esperanza y victoria sobre cualquier adversidad, victoria sobre cualquier duda o incredulidad, victoria sobre cualquier enfermedad o problema, porque en El tenemos la victoria, en su muerte obtuvimos vida y salvación, porque SU VICTORIA ES NUESTRA VICTORIA!! Aleluya!
Gracias Señor, infinitas gracias por tu sacrificio en la cruz del calvario, por darnos vida y salvación, gracias Señor por tu Espíritu que nos levanta nos renueva, nos da vida, hoy te pedimos Señor que tu Espíritu que mora en nosotros venga a vivificar nuestros cuerpos, a darnos un nuevo aliento, un renuevo, avívanos con tu poder, con tu fuerza, trae un avivamiento a nuestros corazones para que resurjan de toda pasividad y sean levantados por ti, Señor transforma nuestras vidas a tu imagen y sella esta palabra en nuestro corazón para que siempre tengamos presente que tu espíritu mora en nosotros y vivifica nuestro interior, gracias Señor por tu victoria, gracias por que te has levantado y nos levantas Señor! Amén!
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