martes, 5 de marzo de 2013

LA MAYORDOMIA DE NUESTRAS EMOCIONES

La semana pasada estuvimos hablando acerca como podemos ser buenos mayordomos de nuestras emociones y cómo podemos administrarlas y no vivir esclavos de ellas sino controlarlas nosotros.  Recordemos que las emociones son sentimientos pasajeros y generalmente generan un impulso que nos lleva un estado de animo que después de un tiempo pasa, como la tristeza, el enojo, la alegria, etc. la palabra de Dios nos da claves para no vivir esclavos de nuestras emociones, la semana pasada compartimos  la escritura Amaras al Señor con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas, hablamos lo importante que es guardar cada uno de ellos para EL Señor, guardarlos es vigilar, cuidar, guardar qué es lo que entra y luego reina en nuestro corazón, alma y mente.
Hoy hablaremos de un tema muy importante para ser buenos administradores de nuestras emociones y hablaremos de una emoción específicamente que es LA DEPRESION.
La depresión es según el diccionario de la Real Academia Española  “estado de animo derribado o abatido que generalmente puede ser transitorio o permanente”.
Otra definición es que la depresión es la falta de aceptación de la situación que una persona esta viviendo.



Pero podemos llegar a ser controlados por esta emoción en vez de controlarla nosotros? La respuesta es si… la depresión puede llegar a ocupar el centro de nuestra vida y puede llegar a controlar no solo nuestros pensamientos sino nuestra manera de ser, de actuar, de hablar, nuestro trabajo, nuestra familia y todo lo que nos rodea al punto de vernos derribados, abatidos u oprimidos por ella.
Pero Dios nos ha dicho que nosotros no podemos dejar que nada controle nuestra vida las emociones tampoco son nuestras, no puedo hacer mio un estado de animo y que este a su vez se apodere de mi.
Un cristiano puede sufrir depresión, la respuesta es si, podemos dejar que nuestra mente sea controlada y llevada  cautiva y a pesar de conocer a Dios no lograr controlar ese estado de animo que nos oprime, el enemigo de nuestras almas va a hacer lo imposible por desanimarnos, y un cristiano desanimado es un cristiano derrotado, los grandes hombres de la Biblia tuvieron  etapas de desánimo, de frustración de cosas que no salieron como ellos pensaban que saldría y se hundieron en la depresión, pero lograron vencer la depresión y no ser presos de ella.
Hoy hablaremos de 3 consejos para aprender a ser buenos mayordomos de nuestras emociones en este caso concreto para evitar caer en la depresión:

1. DEJAR EL PASADO ATRAS. Isaias 43:18 dice: No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. Hay cosas que no podemos cambiar, lo que quedó en el pasado ya no se puede arreglar, podemos hacer algo con nuestro presente y sembrar en nuestro futuro porque todavia no ha llegado pero no podemos hacer nada con nuestro pasado porque ya no está en nuestras manos solucionarlo. La palabra de Dios dice que no recordemos las cosas pasadas, que no traigamos a memoria o sea que somos nosotros quienes  rebuscamos en nuestros recuerdos, buscamos cosas que nos duelen, recuerdos que nos hieren y nos dañan, alimentamos la autocompasión y finalmente nos deprimimos al rebuscar las cosas pasadas.
2. TODO OBRA PARA NUESTRO BIEN.Romanos 8:28 nos die “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”
Pensar en que todo obra para nuestro bien, no solo debe ser un pensamiento sino una convicción, debemos estar convencidos que todo obra para bien o sea que ya no hay cosas malas, sino estan las cosas buenas y las que obran para bien, esta manera de pensar me ayudará a ver las cosas de diferente manera todo obra para mi bien, si esto que estoy viviendo no es bueno a mis ojos, pues entonces obrará para mi bien. Dios es perfecto y no se equivoca debo centrar mi pensamiento en que si Dios ha dicho que a los que aman a Dios todas las cosas les ayudan a bien, entonces es verdad.

3. QUITAR LOS OJOS DE NOSOTROS MISMOS. Cuando quitamos nuestros ojos de nosotros mismos, es cuando comenzábamos a experimentar la liberación de la depresión
La palabra de Dios dice en Puestos los ojos en Jesus, que quiere decir esto, que nuestros ojos pueden quitarse de Jesus y fijarse en nosotros mismos y alli comienza la raíz de nuestras depresiones, hay una frase que dice:” no hay un ser humano más miserable en esta vida, que aquel  que sólo piensa en si mismo”.  Cuando estamos deprimidos usamos mucho los pronombres mi, mio, yo, a mi.  Aquellas personas que solamente se están preocupando en su problema, su desilusión, su frustración, lo que les hicieron,  que no le reconocieron, etc. etc. y comienzan a hundirse, aprendamos quitar los ojos de nosotros mismos y a ponerlos en Jesus, nadie ha sufrido como El, nadie ha sido tan humillado o lastimado como El, pongamos nuestros ojos en Jesus y quitemoslos de ese problema que se ha convertido en un gigante para nosotros muy importante veamos tambien las necesidades de los demás todos de una u otra forma llevan alguna carga, no tenemos el derecho exclusivo del sufrimiento, cientos y miles de persona a nuestro alrededor tambien están pasando tiempos dificiles y podemos ver en qué podemos ayudarles.

Resumiendo NO RECUERDES EL PASADO, TODO OBRA PARA BIEN Y QUITA LOS OJOS DE TI MISMO, estos tres consejos que nos da la palabra de Dios nos ayudarán a administrar bien mis emociones y a no ser controlados por la Depresión.

Proxima semana la mayordomía de nuestro cuerpo.