sábado, 11 de noviembre de 2017

DULCE ESPÍRITU SANTO


"Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, 
os lo enviaré."
Juan 16:7

A  la mayoría de personas le agrada que le traten con dulzura, la cual es la forma suave, plácida y tierna de mostrar o expresar cariño hacia alguien, la dulzura hace agradable a una persona, le abre puertas que otros cierran y es lo contrario a la aspereza.  Dulzura es esa forma diferente de acercarse a alguien con amor y cuidado, que consuela, anima, fortalece y hace sentir a los demás especiales.

Jesús es amor y el Espiritu Santo es la dulzura de Dios por eso dice la escritura de hoy que nos convenía que Jesús se fuera para que pudiera enviarnos al consolador, al Espíritu Santo de Dios. 

El Espíritu Santo  existe desde siempre y para siempre, porque El Espíritu Santo es Dios, y es tan importante para nuestra vida, ya que es El quien ahora mismo se encuentra entre nosotros.

Creo que todos desearíamos  haber visto a Jesús cuando estuvo aquí en la tierra, escucharle hablar, verle hacer milagros, sanar enfermos, liberar cautivos, pero Jesús ya vino y estuvo aquí en la tierra y llevó a cabo el plan que tenía preparado junto con el Padre y El Espiritu Santo, pero quien está con nosotros hoy y ahora es Su Santo Espíritu y debemos valorar su presencia y hacerla viva cada día en nosotros.

Es muy importante que conozcamos y anhelemos aprender más acerca del Espíritu Santo, Jesús dijo que nos convenía que Él Se fuera, pero Por qué nos convenía que se fuera Jesús si El sanaba enfermos, daba palabra al pueblo, hacia milagros y prodigios? Jesús sabía que a través del Espíritu Santo ibamos a conocer más de cerca Su amor, su consuelo, su protección, su revelación y todas las cosas que El no revela cada día.

Jesús envió al Espíritu Santo porque El es el consolador, que anhela estar con nosotros y que nos puede revelar todo lo que Dios quiere que conozcamos para hacer Su voluntad. La dulce presencia del Espíritu Santo en nosotros hace cambios en nuestras vidas, transforma, guía y nos llena. 


Gracias Señor por tu amor hacia nosotros y por enviarnos al consolador, al Espíritu Santo quien hoy está a nuestro lado para amarnos, consolarnos, bendecirnos, guiarnos a toda verdad, redargüirnos y hacernos sentir tu amor, tu ternura, tu cuidado y tu dulzura, gracias Espíritu Santo por estar hoy aquí a mi lado, anhelo saber más de ti, anhelo conocerte y recibir tu amor, gracias por estar conmigo siempre dulce Espíritu Santo! Amén!