" Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna."
Romanos 6:22
"El verdadero ideal cristiano no es ser feliz, sino ser santo." A.W. Tozer En nuestros tiempos no es común hablar de santidad, ser santos y santificarse. La palabra santificarse posee dos significados el primero es ser apartado, guardado, separado para el servicio de Dios y el segundo es guardarse santo en conducta, pensamientos, alma y corazón.
La palabra Santidad la encontramos en varios pasajes de la Biblia y en el libro de Romanos muestra la santidad como un fruto, un fruto que como cristianos debemos dar en abundancia.
Este fruto es muy importante, ya que cuando permanecemos en El Señor uno de nuestros frutos será la santidad, el fruto de un hombre o una de mujer que permanecen en El Señor es vivir en santidad, apartados de toda contaminación lejos de toda corrupción y maldad, lejos de toda inmundicia y pecado del mundo, haciendo cambios en nuestra vida no solamente por apariencia delante de los hombres sino siempre para agradar al Señor.
El fruto de santificación me lleva a apartar mi mirada de todo aquello que me separa de Dios, esto incluye mis palabras, conversaciones, actitudes, la música que escucho, mis amigos, mis ojos, mi cuerpo, los lugares que frecuento y cada cosa que hago, este fruto se da en mi corazón y es testimonio para los que me rodean.
Este fruto en mi me llevará a hacer viva la palabra de ser santo porque El es Santo!
Señor anhelo el fruto de santificación en mi, fruto de santidad, apartarme para ti en todos los aspectos de mi vida, que este fruto sea de bendición para muchos y agradable a ti. Amén!!!
