martes, 10 de enero de 2017

PACIENCIA Y FE



"Nosotros mismos nos gloriamos de vosotros, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis. 

Esto es demostración del justo juicio de Dios, 

para seáis tenidos por dignos del reino de Dios"

2 Tesalonicenses 1:4-5


Existe una frase que dice "la paciencia es la virtud o la cualidad de los sabios" y es tan importante practicar la paciencia en medio de cualquier circunstancia.
Cuando se es niño es difícil aplicar la paciencia, ya que los niños rápidamente se inquietan cuando ven que no logran conseguir algo que desean o si tienen algún plan para ir de paseo y se cambia, les es difícil aceptar la situación y entender el por qué de las cosas.

Como adultos nos cuesta también enfrentar las situaciones diarias de la vida y sobre todo cuando viene la adversidad, contradicciones y confusiones que no nos dejan ver claramente cuál será nuestro porvenir o qué nos depara el destino, nos impacientamos, podemos llenarnos de temores y quisiéramos tener la solución pronto a nuestro alcance para sentirnos tranquilos otra vez.

La paciencia en la palabra de Dios es un fruto del Espíritu Santo que se hace visible y se manifiesta cuando nos enfrentamos a la prueba y a la adversidad, los corazones que han aprendido la paciencia manifiestan una actitud diferente cuando pasan por tribulaciones, un corazón probado por Dios sacará a luz actitudes como aceptar sin quejarse, seguir adelante sin cuestionar y vive el día a día sin mirar atrás para lamentarse o hacia adelante para inquietarse, porque ha aprendido a vivir un día a la vez.

Las pruebas producen paciencia, el que ha sido probado y ha aprendido la paciencia sabe que la frase "esto también pasará" es algo tan real como la vida misma, en la adversidad la paciencia te enseña a veces a ser como un cedro firme que no se tambalea y permanece en pie o te enseña a veces a ser un junco suave y flexible que se doblega y humildemente deja pasar el viento fuerte para luego volverse a levantar.

Las prueba siempre nos enseñan, Dios las permite por muchos motivos y uno de ellos es practicar, ejercitar y vivir la paciencia. No se qué situación estés viviendo en estos momentos, si te toca ser cedro manteniendote firme y sin tambalear ante los vientos o junco que se mantiene dócil y permite que el viento pase sobre el sin romperse. Quizás debes esperar a que algo pase o debes tomar decisiones, cualquiera que sea la situación, deja que Dios te enseñe a través de la paciencia, pon tu fe a funcionar, Dios nunca te ha dejado y está vez no será diferente. 

Recuerda que la escritura dice que las pruebas y tribulaciones que soportamos permiten que seamos tenidos por dignos del reino de Dios!

 Señor gracias por todo lo que permites para nuestras vidas y gracias también por la pruebas que producen paciencia en nosotros, te pedimos que nos enseñes a esperar en ti pacientemente, a vivir un día a la vez sin lamentarnos por lo que ya pasó y sin inquietarnos por lo que viene en el futuro. Señor queremos ser dignos de tu reino, dignos de ser hijos tuyos, aprendiendo paciencia en nuestro carácter y fe para alcanzar tus promesas, gracias porque sé que de esta situación adversa que hoy estoy viviendo aprenderé y tu me enseñarás, dame la gracia para vivir cada día de acuerdo a tu voluntad, y ayúdame a tener siempre paciencia y fe en todo lo debo vivir día a día. Amén!