sábado, 29 de octubre de 2016

TU ME HARÁS ENSANCHAR!



"Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar;
Ten misericordia de mí, y oye mi oración."
Salmo 4:1

No hay nada más difícil que vivir oprimido, estar oprimido y permanecer oprimido, la opresión es el acto de presionar algo, sentirse sofocado, abrumado y sometido a algo involuntariamente. La opresión es un malestar interior, que se convierte en una angustia que sobrepasa nuestros pensamientos, nos roba el ánimo y la alegría, las ganas de luchar, de vivir y nos roba la paz completamente.

El pueblo de Israel a lo largo de las escrituras vivió momentos de opresión, en el tiempo de Moises vivían oprimidos bajo la autoridad de los egipcios y fueron liberados de su angustia, sacándolos de Egipto hacia la tierra prometida. En el libro de Ester el pueblo de Israel es oprimido y Dios utiliza a una mujer para convertirse en reina y salvar a su pueblo de la opresión. David fue oprimido y perseguido por el Rey Saúl, llegando a esconderse en una cueva para que no le encontrasen. El mismo Jesús fue oprimido como lo dice el profeta Isaías "Fue oprimido y afligido, pero no abrió su boca".

El pueblo de Dios puede pasar por tiempos de opresión y angustia, Jesús nos comprende cuando nos sentimos oprimidos, porque vivió en su propia carne lo que era la opresión, El nos comprende cuando vivimos oprimidos por situaciones o personas, cuando la angustia se apodera de nuestro corazón con temores o miedos y no vemos la salida. Y en esa angustia, en esa intranquilidad e inquietud en la que podemos sentirnos Dios nos habla en su palabra y nos dice cuando estás en angustia yo te hago ensanchar.


Hace unos días me preguntaba por qué Dios nos hace ensanchar? Y es porque ensanchar es contrario a la opresión.  Cuando más oprimidos, ofuscados, presionados, sometidos y encerrados nos veamos, Dios levanta esa presión de nosotros y nos abre espacio, quita de nuestro corazón esa sensación de angustia e impotencia y nos lleva a un lugar espacioso, ensancha nuestros corazones, agranda ese espacio en el que nos sentimos presos y nos lleva a libertad.

Te sientes oprimido? Te encuentras angustiado, presionado, acongojado, desanimado y sin fuerzas, preso de tus pensamientos, ideas y situaciones? Hoy El Señor traer libertad a ti y te hace ensanchar. El tendrá misericordia de ti y escuchará tu oración.  Cuando sentimos angustia lo primero que buscamos es desahogar nuestros sentimientos con alguien y que nos escuche, pero antes de ir a cualquier persona debemos ir al Señor con esa angustia, con esa opresión en nuestro pecho, clamar a El con todo el corazón y entonces El escuchará nuestra oración y nos hará ensanchar, quitará ese peso de nuestro corazón y traerá libertad.

Dios abrirá espacio para ti, no te angusties, no creas que todo está perdido, el te hará ensanchar en medio de tu angustia y volverás a sonreír. Solo nuestro Dios puede hacerlo, El escuchará tu clamor.

Señor en mi angustia a ti clamo, entrego a ti mi corazón y toda opresión que siento sobre mi vida, hay tantas cosas que salen de mi control, pero no quiero vivir bajo opresión, toma mi angustia, toma mi inquietud y mi intranquilidad, descanso hoy en ti, abre espacio para mi, dame libertad, hazme ensanchar Señor y obra conforme a tu justicia,  yo solamente confío en Ti, se que no me dejarás! Amén!