lunes, 15 de octubre de 2018

ESPERO EN TU PALABRA!




"Me anticipé al alba, y clamé; Esperé en tu palabra."

Salmo 119:47

En los últimos años hemos tenido que aprender, memorizar y aplicar palabras nuevas y términos nuevos que hace muchos años no teníamos en nuestro vocabulario.  Palabras como página web, chat, app, RAM, gigas, megas, actualizaciones, estar en linea, redes sociales, subir a la nube, youtube, whatsapp, facebook, twitter y muchísimas más, eran palabras hasta hace quizás 20 años desconocidas, tanto su significado como su aplicación correcta a nuestra manera de hablar diariamente.

Es innegable que si queremos estar actualizados y no quedarnos atrás, hemos tenido que aprender estas palabras y no olvidar su significado, ya que forman parte de un mundo de nuevas comunicaciones que nos acerca cada día más a muchas personas, forman parte de nuestro trabajo y de la sociedad actual.

Reflexionando en todo esto, pensaba en la escritura del Salmo 119 que dice "esperé en tu palabra", porque aunque se han agregado términos y palabras nuevas a nuestro vocabulario, la palabra de Dios sigue estando viva, sigue estando allí para hablarnos, para confrontarnos, para alentarnos, animarnos, consolarnos, guiarnos y darnos nueva vida. 


Entonces, ¿Por qué hacemos el esfuerzo de aprender cosas nuevas y  por qué no nos esforzamos en conocer la palabra de Dios, su significado y lo que Dios quiere decir hoy a nuestras vidas? Es más algunas veces se nos hace difícil sentarnos a leerla, meditar en ella, escudriñarla y descubrir  qué significan cada una de esas palabras santas que están escritas desde hace tantos siglos y que hasta el día de hoy no han perdido su validez y siguen reconfortando corazones de generación en generación. 

Hoy te animo a que como dice este precioso Salmo, te anticipes al alba y clames al Señor, esperando en Su palabra.  Anticiparse al alba es aún antes que amanezca, antes que aparezcan los primeros rayos del sol, nosotros estemos allí buscando la presencia de Dios y buscando qué quiere decirnos hoy en Su palabra y esperar en ella, sin desesperarnos, sin perder la esperanza, sin perder la confianza y la paciencia. 

¿Estás pasando por tiempos de aflicción? Su palabra te conforta, te anima y te devuelve la esperanza.  ¿Estás pasando por tiempos de enfermedad? Su palabra te alienta, trae sanidad y fe para creer que serás sanado.  ¿Estás pasando por tiempos de escasez, de soledad, de frustración? Su palabra te habla de un Dios proveedor, un Dios que te acompaña todos los días de tu vida, un Dios que nos ha dado la victoria, un Dios que quiere seguir hablando a Su pueblo  y que nos ama incondicionalmente.

Hoy a pesar de tanta nueva tecnología y tantas cosas nuevas, la palabra de Dios sigue hablándonos y en ella debe esperar nuestro corazón.  No está mal vivir actualizados con el mundo natural, pero cada día debemos de actualizarnos en el espíritu, buscando del Señor, buscando de Su palabra y lo que quiere El decirte hoy.  No te pierdas esa gran oportunidad de amor que Dios te sigue dando día tras días, lee, aprende, escudriña y sobre todo ESPERA EN SU PALABRA!


Señor ayúdame a esperar en tu palabra, a conocerla, entenderla y aplicarla en mi vida, Señor espero en tu palabra!