martes, 17 de septiembre de 2013

MAYORDOMIA Y MAYORDOMIA DE NUESTRA VIDA CRISTIANA

Hoy continuaremos hablando de esta área de nuestras vidas llamada Mayordomía… para refrescar un poco que es la mayordomía podemos decir que  la palabra de Dios dice en 1ra. Pedro 4:10 “QUE SOMOS ADMINISTRADORES DE LA MULTIFORME GRACIA DE DIOS”  la palabra de Dios habla que nosotros somos ADMINISTRADORES NO SEÑORES, en la antigüedad un Señor era el dueño, propietario, el que tenia la máxima autoridad en un casa, en un reinado, en una ciudad y luego existía una persona muy importante llamado MAYORDOMO que era el ADMINISTRADOR de los bienes de su Señor, traducido a nuestros días podríamos decir que EL SEÑOR, EL REY, EL DUEÑO es JESUS, el es el Señor de nuestras vidas y nosotros somos solamente los ADMINISTRADORES de todo lo que Dios nos ha dado porque REALMENTE TODO LE PERTENECE A EL. Hay una alabanza muy especial que dice: “Todo es de mi Cristo por El y para El” y muchas veces la cantamos en nuestras iglesias y repetimos estas palabras pero debemos hoy preguntarnos realmente TODO ES DE NUESTRO SEÑOR POR EL Y PARA EL…??? La mayordomía es un ejercicio constante en nuestra vida diaria para no solo ser buenos administradores de todo lo que Dios nos da, sino también un medio por medio del cual le damos la gloria a Dios con nuestra vida y que El se agrade de nosotros en todo lo que somos y hacemos.
Hoy quiero compartir un área de la mayordomía muy importante y es el ser buenos mayordomos de nuestra vida Cristiana… así como debemos aprender a ser buenos mayordomos de nuestras finanzas, de nuestra familia, de nuestras relaciones, de nuestras palabras, etc.  También el decir que somos cristianos lleva un compromiso de vida ante los demás y un caminar diario comprometido con El Señor y con Su palabra.
Para ello quiero hoy tocar 3 puntos importantes de cómo llegar a ser buenos mayordomos de nuestra vida Cristiana hay muchísimos mas pero para comenzar a buscar esa mayordomía de nuestra vida cristiana veremos que:
1.    Soy propiedad de Jesús y debo demostrarlo:  Ser un buen administrador de mi vida cristiana implica que Jesús está y va conmigo a todos los lugares que yo vaya, en casa, en mi familia, en mi trabajo, con los vecinos, obviamente con los hermanos de la iglesia, con mis amigos.  Una mala mayordomía de nuestro cristianismo sería alabar al Señor en la iglesia y con otros cristianos  pero luego convertirme como dicen por allí en un “cristiano en lo secreto”, nunca hablo de Jesús, si veo a alguien pasando dificultades o problemas en mi trabajo o en mi entorno no le consuelo con palabras de Dios sobre su vida. En mi hablar diario debe haber una sazón diferente que muestre que Jesús está en mí, yo debo esforzarme por hacer la diferencia donde quiera que estoy, incluso en el ambiente cristiano… y eso me lleva al segundo punto.
2.    Mi ejemplo habla más que mil palabras: para ser buen mayordomo de mi cristianismo  deben de caminar en todo momento en unidad mis palabras, con mis pensamientos y mis actos, podré alcanzar muchas personas con mis palabras pero si luego mis hechos niegan la eficacia del evangelio en mi vida habré perdido todo el trabajo que yo y otros cristianos tratan de hacer, muchas personas esperan que les den palabras de esperanza, palabras contrarias a lo que en el hablar diario se encuentran y nosotros como cristianos podemos ser una luz en medio de tanta inconformidad, cómo reaccionamos ante un problema, nos enfadamos rápidamente, nos  descontrolamos por cualquier situación, aunque tu hables de Jesús todo el día si tu ejemplo no muestra la vida de Dios en ti, todas las palabras que has dicho se pierden y terminamos siendo malos administradores de nuestra vida cristiana.
3.    Mi testimonio: Una de las mejores herramientas que tenemos para poder ser auténticos cristianos y seguidores de Jesús es nuestro testimonio, lo que Dios ha hecho en nuestra vida, un buen mayordomo de su vida cristiana busca la oportunidad para poder compartir lo que Cristo ha hecho en su vida, muchas personas que están a nuestro alrededor pueden ser impactadas si hablamos de cómo Dios nos ha sacado adelante, de dónde Dios nos ha sacado, cómo hemos superado adversidades, enfermedades, vientos contrarios y Dios siempre ha estado allí, nuestro testimonio es necesario para poder bendecir a otros y hablarles de Jesús porque son hechos reales y que hablan de las maravillas que Dios puede hacer.  Hace dos días me pasó estaba hablando con unas madres de colegio de mi hijo y una de ellas estaba muy triste porque una amiga tiene una hija pequeña con cáncer y bueno no pude contenerme y aprovechar para hablarle de mi testimonio y cómo Dios nos regaló como matrimonio dos niños y uno de ellos nos lo prestó durante 4 años y padecimos junto con él un cáncer muy maligno y pudimos vencer la enfermedad, no porque nuestro hijo sanara  sino por todo lo que Dios nos enseñó a través de el y la prueba tan fuerte que vivimos,  sabemos que fue un regalo del cielo prestado por 4 años aprendimos muchas cosas de nuestro angelito y Josué (asi se llamaba) ahora se encuentra en casa otra vez ha vuelto al padre, y he podio testificar de la consolación de Dios sobre nuestras vidas comp padres y como familia, la verdad esta madre que hablaba conmigo se quedó muy impactada escuchando mi testimonio y quedamos de hablar en unos días porque qué mejor testimonio que nuestras vivencias con un Dios vivo y real. 
Así que hoy quiero animarles a que podamos ser buenos administradores de nuestra vida Cristiana, al final de nuestros días podemos irnos con la felicidad en nuestros corazones PRIMERO porque hemos llevado a Jesús donde quiera que fuimos Segundo hemos dado testimonio de sus maravillas y Tercero nuestro ejemplo ha traído a muchos a Jesús y les ha bendecido.

Proxima semana: Seguimos hablando de la mayordomía de nuestra vida cristiana enfocada a nuestros hijos.
Lo importante que es enseñar a nuestros de Jesús y que ellos vean la vida de Dios en nosotros.