lunes, 5 de diciembre de 2016

SE PROPICIO A MI


"Jehová, que es bueno, sea propicio a todo aquel que ha preparado su corazón para buscar a Dios"
2 Crónicas 30:18

Cuando es un momento es propicio es un momento adecuado, favorable, conveniente, indicado, propicio es el momento apropiado para realizar algo, no antes ni después es el momento o el tiempo propicio.

Si hablamos de cosas, cuando algo es propicio es algo correcto, perfecto, adecuado, que encaja justamente bien, algo que cubre y es exactamente lo que se necesita.

Cuando alguien es propicio es alguien bueno, ayudador, favorecedor, amable y benigno.

El clamor de varios hombres en la biblia es pedir al Señor que sea PROPICIO a sus vidas, clamando por perdón de pecados, por la defensa de sus enemigos, por la intervención de Dios en situaciones complicadas, El puede ser propicio a nosotros en todo tiempo, en todo lugar y ante cualquier situación.

La bondad de Jehová es para siempre, nuestro entendimiento no logra alcanzar la inmensidad de Su poder, Su amor sobre nosotros, Su inigualable paciencia y Su corazón de Padre para guardarnos, librarnos, protegernos y bendecirnos.

Si estás pasando por tiempos de enfermedad donde no tienes fuerzas, hay dolor, padecimiento, angustia y desesperación, pide al Señor que sea propicio a ti. Quizás estás pasando por momentos adversos, problemas económicos, relaciones familiares destruidas, tiempos de dificultades difíciles de sobrellevar, clama al Señor y dile Señor sé propicio a mi.

Cuando Dios es propicio a nosotros muestra Su poder cambiando las cosas que nosotros no podemos cambiar, transforma en favorables nuestros sufrimientos porque los permite para nuestro bien y nos da la salida de manos de nuestros enemigos. 

Clama hoy al Señor desde lo más profundo de tu corazón diciéndole:


Señor se propicio a mi, perdona mis pecados, limpia la maldad de mi corazón, que pueda ser libre toda atadura, toma en tus manos está situación imposible y desesperada, mírame Señor con ojos de amor y misericordia y abre puertas que están cerradas y entorpece el camino de mis enemigos para que yo pueda pasar y ser libre. Pon tu mano sobre mi vida Señor, toma mis preocupaciones y cambia el viento a mi favor, ayúdame Señor, has lo conveniente, lo apropiado y lo justo en mi vida, tu que eres bueno y eres justo, se propicio a mi! Amén!