"y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu sanador."
Exodo 15:26
Hay un bien invaluable, que no consideramos como tal hasta que lo perdemos y es la salud, cuando tenemos salud todas las demás cosas pueden irse realizando algunas veces más pronto, otras veces más tarde, pero si no tenemos salud, si nos faltan las fuerzas, si nos sentimos mal o tenemos una enfermedad de gravedad todo nuestro alrededor cambia tajantemente, y tristemente de esto muchas veces no nos damos cuenta porque damos por hecho que tendremos salud siempre, hasta que nos falta. Cuando uno de nuestros miembros se enferman todos se duelen con el, y perdemos la fortaleza completa de hacer las cosas porque ese factor es determinante para el desarrollo de nuestras vidas.
En el libro de Exodo es donde aparece la primera vez el nombre de Dios como Jehova Rafa, Jehova tu sanador. El cambió lo amargo a dulce, el conocía el cansancio que el pueblo de Israel traían por el desierto, durante 3 días bajo el calor abrazador y la sequedad de desierto caminando era devastador, sin probar una gota de agua, era urgente una solución o el pueblo moriría, pero al llegar al lugar donde había agua era imposible beberla porque era amarga, lo que significaba más dolor, desesperación y angustia para el pueblo, pero allí se levantaba en medio de ellos esa promesa YO SOY TU SANADOR.
Dios es quien puede cambiar nuestra amargura y dolor, en dulzura y sanidad, El es el único que puede devolvernos las fuerzas, las ganas de vivir, quitar cualquier dolor que tenga nuestro cuerpo por más difícil que sea para la ciencia, para Él no lo es porque Él nos ha creado y Él sabe cómo curarlo.
Necesitamos pedir salud para terminar e iniciar y vivir un nuevo año, sin ella todo cambiaría en nuestra vida personal, cuando un miembro de nuestra familia enferma todo cambia también y debemos ajustar nuestra vida a esta situación nueva y difícil, por eso debemos clamar a Jehová Rafa, nuestro sanador para que renueve nuestras fuerzas, nuestra resistencia, para que tome cada parte de nuestro cuerpo y sea sano, para que todo lo que deseamos hacer podamos realizarlo.
Lo único que El Señor pide es: que escuchemos su voz, que hagamos lo recto delante de sus ojos y que cumplamos su palabra y la hagamos viva en nosotros!
Jehová Rafa, quien puede cambiar nuestras aguas amargas en aguas dulces, si tenemos salud bendigamos al Señor por ese regalo tan valioso y tan perfecto y pidamos que sigamos y nunca nos falte. Si nos falta salud en alguna parte de nuestro cuerpo en alguna persona de nuestra familia, pidamos a Jehová Rafa que traiga sanidad y quite el dolor y la amargura de nuestras vidas para que podamos seguir adelante y ser fuertes en El.
Jehová Rafa bendecimos tu nombre, porque en ti hay esperanza, esperanza de vida, de sanidad, de restauración, Tu eres bueno y por amor a nosotros puedes cambiar lo que hoy está enfermo y sanarnos, toma el control de nuestra vida y danos salud Señor para poder hacer todas las cosas que quieres que hagamos, gracias por la salud, por las fuerzas y por la vida, que no falten en nosotros ni un solo día de nuestra vida, transforma toda amargura en bendición y todo dolor en fortaleza, en el nombre de Jesús! Sana nuestra tierra, sana nuestros cuerpos, sana nuestras familias, sólo tu puedes hacerlo Señor! Te entregamos el mes de septiembre del año 2019 en tus manos, toma tu el control de todo, de cada momento y de cada día de este mes que nos darás en este próximo año. Amén!
