sábado, 4 de junio de 2016

SOLO DIOS BASTA



"Entonces Jehová dijo a Gedeón: 
Con estos trescientos hombres que lamieron el agua
os salvaré, y entregaré a los madianitas en tus manos;
y váyase toda la demás gente cada uno a su lugar."
Jueces 7:7


Gedeón estaba dispuesto a hacer la voluntad de Dios, había recibido en su corazón varias confirmaciones que la mano de Jehová estaba con él, estaba decidido a ir a la batalla para liberar a su pueblo de la opresión de los madianitas. Los madianitas habían estado oprimiendo al pueblo de Israel durante siete años y venían con su ejercito sobre sus ciudades, llevándose sus cosechas, sus animales y devastando todo lo que estaba a su paso. Por este motivo Gedeón había llamado a un gran ejercito para que le acompañara y pudieran hacerle frente a sus enemigos.


El pequeño detalle es que Dios no piensa como los hombres, Gedeón escogió mas de treinta mil hombres, que serían suficientes para ganar la batalla, pero Dios le dice: El pueblo que está contigo es mucho y si va tanta gente pueden pensar que la victoria no la he dado yo, sino que ha sido por su propia mano, puede envanecerse su corazón y sentir seguridad y apoyo por la gran cantidad de guerreros que van a pelear. Así que pregúntales Quién tiene temor? Quién tiene miedo de ir a esta batalla? Y que se regresen. La respuesta fue inmediata y sorpresivamente abundante, veintidós mil hombres se devolvieron y solo quedaron diez mil. Pero aún había mucho pueblo y debían probar a los que restaban con una cosa sencilla y solamente fueron escogidos los que bebieron llevando el agua con la mano a su boca, sólo quedaron 300 hombres.

Cuando Dios ha determinado hacer algo para librar a su pueblo de la opresión de sus enemigos, no necesita de grandes cantidades de hombres para hacerlo, necesita corazones libres de temor y dispuestos a esforzarse.

Hoy en día no libramos batallas campales donde necesitamos un ejercito para afrontarlas, pero podemos preguntarnos dónde esta puesta nuestra seguridad? Gedeón quizás estaba descansando en la seguridad de un gran ejercito. Pero Dios le quitó esa seguridad reduciéndolo a solo 300 hombres.
En quién descansa nuestra vida? Quizás en la cantidad de amigos y personas cercanas para no sentir soledad? Quizás en la cantidad de bienes materiales? En nuestros propios dones y talentos? Descansamos y nos apoyamos en muchas cosas que nos dan seguridad, pero Dios dice: Son muchos, porque quiere que nuestra seguridad y nuestra vida descansen en El completamente, porque El es poderoso y suficiente para pelear por nosotros.

Dios no mira las cosas como nosotros las vemos, lo que para nosotros es mucho para El no es nada y lo que para nosotros es poco para El es suficiente. Descansa hoy en Dios y deja la seguridad de tu vida en El, permite que Dios sea Dios en tu corazón y en todo lo que haces, no camines con El y al mismo tiempo apoyándote en personas, lugares, cosas o en ti mismo. Dios puede liberarte, hacer milagros en tu vida, responder a tus peticiones y hacer cosas imposibles, pero la condición es que el quiere ser el único, porque El es más que suficiente.

Sólo Dios basta!!!


ORACIÓN: Señor te entrego mi vida una vez más y pongo en tus manos mi seguridad, mi fortaleza y mi confianza, Tu eres más que suficiente. No quiero poner mi fe en lo que soy, en lo que tengo, en personas, en mi capacidad, en bienes materiales,  mi fe está puesta en ti, en Tu poder, en Tu soberanía. Ayúdame a no poner mi seguridad en nada que no seas Tu, tu tienes el poder para liberarme de toda opresión, tienes el poder para sacarme de cualquier circunstancia adversa, tu peleas por mi y mis batallas tu las libras y me das la victoria, descanso hoy en ti Señor, sólo en ti confía mi corazón. Amén!