lunes, 21 de mayo de 2018

TU LO SABES TODO!


"Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara,
 cuando estabas debajo de la higuera, te vi."
Juan 1:48

La higuera en los tiempos antiguos era un árbol considerado como un lujo tenerlo en las plantaciones y diversos lugares, ya que lo grande de su follaje y su altura permitían resguardarse del sol y refrescarse. Cuando alguien quería alejarse del bullicio y meditar, qué mejor que la sombra de una higuera para pensar, meditar, reflexionar y resguardarse del sol.

Jesús estaba llamando a sus primeros discípulos y Natanael seguramente era alguien especial, antes que Felipe le llamara ya Jesús le había visto, ya le había escogido para que fuera uno de los suyos, Jesús conocía las intenciones de su corazón y mayores cosas que esa le profetizó verían sus ojos.

La biblia nos cuenta que Natanel era un israelita, a quien el mismo Jesús le llama alguien en quien no hay engaño, Natanael se sorprendió al escuchar sus palabras ¿Cómo este hombre podía saber que en el no había engaño? Jesús conocía su corazón, sabía que era un hombre fiel, pero que también había casi afirmado que de Nazaret no podía salir nada bueno. El había estado un poco antes debajo de una higuera, quizás resguardándose del sol, pero también reflexionando y meditando, cuántas cosas pasarían por su mente, pero todo lo que estaba en su interior Dios lo conocía.

Nadie nos conoce mejor que Jesús, el examina hasta lo más profundo de nuestros corazones, el conoce si hay fidelidad o falsedad en nuestro interior, el conoce lo que pensamos, conoce las intenciones de nuestro corazón y los motivos por los que nos movemos, El conoce profundamente qué hay en nosotros y de qué estamos hechos, conoce nuestras debilidades y fortalezas, El sabe todo de ti.

Quizás algunas veces puede pasar por nuestra mente que no somos escuchados por Dios, porque  las respuestas a nuestras peticiones no llegan cuando nosotros lo deseamos.  En otros momentos no vemos cambios, ni hay variación en nuestra condición de vivir, todo sigue una rutina, un mismo ritmo de vida, trabajos, algunas veces vemos injusticias, falta de amor, cosas que nos desaniman y nos roban las fuerzas, pero aunque parezca que Dios no actúa y no dice nada, El lo ha visto ya y sabe todo de nosotros.

El Señor ve tanto lo bueno como lo malo, el ve día a día nuestro esfuerzo, cómo y de qué forma hacemos las cosas, conoce tus temores, tus inseguridades, tus miedos, tus anhelos, tus ilusiones y los deseos más profundos de tu corazón, El te ha visto llorar cuando nadie lo ha visto, El te ha visto sufrir, aún cuando has sonreído, El te ha visto caminar, correr, hablar, dormir, El ha te ha visto siempre y nada de lo que estés viviendo le es indiferente.

Hoy El Señor nos dice una vez más, no te sorprendas porque yo conozco tu corazón, siempre te veo, y mis ojos están puestos sobre ti, donde quiera que vayas y estés. Recuerda esta promesa "mayores cosas verán tus ojos", solamente tienes que creer y verás la gloria de Dios sobre tu vida!

Gracias Señor porque tus ojos nunca se apartan de mi, tu me conoces interiormente mejor de lo que yo misma me conozco, tu conoces mi acostar y mi levantar, los temores de mi corazón y mis ilusiones, hoy me rindo ante ti Señor, reconozco tu grandeza y tu soberanía sobre mi vida. Confío en ti un día más, con la certeza que todo lo que está pasando en mi vida tu lo estás permitiendo con un propósito, sé que tus ojos están puestos en mi y eso me hace sentir feliz, segura y confiada. Que nunca se aparte tu mirada de mi Señor! Amén