martes, 28 de febrero de 2017

MAS NO DESESPERADOS



"en apuros, mas no desesperados"

2 Corintios 4:8

¿Desesperado?! La desesperación es sencillamente la perdida total de la esperanza, se pierde la paciencia, la tranquilidad y el ánimo, el sentimiento de impotencia embarga nuestro ser y nos llenamos de desesperanza, es en otras palabras, perder el sentido de las cosas y no encontrar razón alguna para seguir adelante.

Y quién no ha estado alguna vez "en apuros" como dice la escritura de hoy en el libro de Corintios, estar en apuros es estar en aprietos, viviendo conflictos y dificultades, con escasez y falta de soporte económico, en aflicción y viviendo uno de esos momentos en los que quisiéramos desaparecer de la faz de la tierra, porque realmente no sabemos qué hacer ante ciertas situaciones que nos toca enfrentar en la vida. Eso es estar en apuros.

La escritura dice que aunque como cristianos podemos estar en apuros, no nos desesperaremos, por muchos conflictos y momentos difíciles que vivamos no podemos perder la esperanza.

El ser un hijo de Dios no nos inmuniza de  pasar por momentos tan difíciles en los que no vemos la salida y sentimos que va llegando el agua al cuello, momentos en los que solamente la intervención poderosa de Dios puede obrar un milagro para salvarnos. La diferencia es que aunque debemos enfrentar esos momentos y estar en apuros, nunca debemos desesperarnos porque nuestra esperanza no está puesta en nada vano o terrenal, nuestra esperanza está puesta en Cristo.

El Señor hoy vuelve a decirnos, no te desesperes! no pierdas la fe! no pierdas la esperanza!!! Porque sabemos que aunque estemos en apuros, en momentos de conflicto, de vergüenza, de humillación, con necesidades, con escasez o en debilidad, siempre podemos contar con nuestro pronto auxilio en la tribulación, que no permitirá que desfallezcamos, que seamos destruidos, que siempre está allí a nuestro lado para socorrernos y darnos la salida para todo, por más imposible que veamos nuestra situación.

Viviremos momentos en apuros, Si, pero sin desesperación, porque El Señor nos ha hecho renacer a una esperanza viva, la esperanza de confiar en Aquel que venció la muerte, resucitó de entre los muertos y tiene la victoria sobre todo y sobre todos!! 

Señor qué grande es tu nombre! estamos maravillados al conocer tu palabra y saber que tu eres nuestra esperanza, nuestra esperanza viva, nuestra esperanza de gloria, nuestra esperanza de salvación! Gracias Señor porque aunque podemos pasar tiempos en los que estaremos en apuros, en conflicto, preocupados, sin ver la salida, sin saber qué hacer, siempre allí extenderás tu mano para socorrernos, para ayudarnos, para levantarnos y para seguir adelante. Desecho toda desesperación de mi corazón, quita todo pensamiento de desesperanza y falta de fe de mi mente, jamás me desesperaré porque yo confío en ti Señor!!