miércoles, 29 de enero de 2020

VIVIR SIN NINGÚN TEMOR!

"El temor del hombre pondrá lazo;
Mas el que confía en Jehová será exaltado."
Proverbios 29:25

El temor es una trampa en la caemos cuando dejamos de confiar en El Señor y empezamos a tener temor de los hombres. El temor, dice la escritura que pone lazo, nos atrapa, es una atadura o un nudo que nosotros mismos ponemos sobre nosotros, ya que por medio del temor el enemigo toma el control de nuestras emociones y sentimientos, nuestra mente y corazón, en sí toda nuestra alma queda atrapada y perdemos nuestra libertad.

El temor ha existido desde siempre, Adán y Eva tuvieron temor que El Señor les viera sin ropa, el temor viene a causa del pecado, a causa de quitar nuestra dependencia total de Dios y aferrarnos a otras cosas donde nos apoyamos y cuando las perdemos somos una presa fácil, porque hemos caído en la trampa del temor. 

Sin embargo la escritura dice en el libro de Proverbios que el que CONFÍA EN JEHOVÁ SERÁ EXALTADO, cuando confiamos en Dios dependemos de Él, no estamos sujetos a lo que las circunstancias externas nos muestran, ni a dónde nos quieren llevar, porque confiamos en nuestro Padre del cielo, quien tiene el control de todas las cosas.  Cuando confiamos al Señor podemos ver la trampa del temor y veremos el peligro, pasaremos alrededor de ella, pero no caeremos porque los que confían en El Señor jamás han sido avergonzados.


Estamos viviendo tiempos en los que podemos llenarnos de temores, ayer viendo las noticias veía tantas cosas como el coronavirus, esas pestes o epidemias que pueden propagarse  a nivel mundial que amenazan nuestra salud, la muerte del Atleta Kobe Bryant repentina e inesperada, además noticias de terremotos, indendios, los climas cada vez son más extremos y nosotros más vulnerables, pero la palabra de hoy nos habla de no tener temor, de no caer en la trampa del temor y que éste ponga lazo sobre nosotros, sino CONFIAR EN EL SEÑOR!

El Señor nos llama a vivir una vida libre de ese lazo que quiere atarnos y quitarnos la vida abundante que produce un corazón confiado en Dios, quien es rey de Reyes y Señor de Señores, quien nunca ha sido vencido, ni derrotado, quien venció a la muerte y quien Reina en gloria y nos sostiene, no hay nadie como Él y quienes en Él confían siempre estarán seguros.


Que podamos vivir este y todos los días confiados en El Señor SIN NINGÚN TEMOR!



martes, 28 de enero de 2020

JESÚS CREO EN TUS PALABRAS!

" Jesús le dijo: Ve, tu hijo vive. Y el hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue." Juan 4:50

La historia de hoy nos lleva a Caná de Galilea, en donde Jesús habia hecho el milagro de convertir el agua en vino, y vino hasta el un oficial del rey, cuyo hijo estaba enfermo, dice la palabra que el venía desde Capernaum, viendo la distancia en un GPS actual, el camino que este hombre hizo fue de aproximadamente unos 38 kilometros andando, un oficial del rey no era un hombre pobre ni sencillo,  sin embargo tenía una gran necesidad en su vida y llegó buscando a Jesús para que sanara a su hijo. 

La historia relata que le pide a Jesús que descienda antes que su hijo muera a lo que Jesús le responde: "Ve tu hijo vive" y dice la escritura que aquel hombre CREYÓ LA PALABRA QUE JESÚS LE DIJO Y SE FUE.  Caminó más de 38 kilómetros para llegar y también hizo 38 kilometros de regreso, haya ido andando o en otro tipo de desplazamiento de aquella epoca, este hombre llegó hasta el día siguiente a su casa, para encontrarse con la maravillosa noticia que su hijo estaba vivo y que desde el día anterior a la misma hora que Jesús pronuncio palabra de sanidad sobre su vida, la fiebre cesó y no murió. 

La fe de este hombre nos lleva hoy a reflexionar, si en nosotros hay una fe tan grande y sobre todo si CREEMOS las palabras de Jesús, como algo cierto, como algo real y con la certeza que así será.

Hoy en día ya no tenemos que desplazarnos kilometros y kilometros para hablar con Jesús, basta cerrar nuestros ojos, buscar su presencia, clamar a Él y hablarle desde el fondo de nuestro corazón. Y para saber lo que quiere decirnos tenemos su palabra cuando abrimos nuestra biblia, allí están sus palabras de vida, su aliento, su corazón, sus mandamientos, todo lo que debemos creer y esperar está en Su palabra. 

Crees en Jesús? Cree en su palabra! Su palabra dice que somos más que vencedores (Romanos 8:28), que andamos por fe y no por vista (2 Co. 5:7), que si El nos ha dado a Su único hijo, cómo no nos dará con Él todas las cosas (Romanos 8:32), Su palabra dice que todas las cosas ayudan a bien a los que aman a Dios (Romanos 8:28), también dice que por sus llagas fuimos todos curados (Isaías 53:59), dice que lo que para los hombres es imposible para Dios es posible (Mateo 19:26), dice que aunque no entendamos las cosas que Él hace hoy, lo entenderemos despues (Juan13:7) y así podemos seguir dando una larga lista de promesas y palabras de esperanza para cada necesidad de nuestro corazón.

Como este hombre oficial del rey, creyó en las palabras de Jesús y se fue seguro de esas palabras y  vio la sanidad en su hijo, así debemos creer y confiar en las palabras de Jesús. Solo hace falta hablar con Él, exponerle las peticiones de nuestro corazón y leer Su palabra para saber lo que quiere decirnos. 

No dudes en tu corazón, CREE, veremos grandes milagros y maravillas! 


sábado, 25 de enero de 2020

SOLO PIENSA EN LO QUE DIOS HA HECHO POR TI!

Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.
Filipenses 4:8


Todos queremos un poco de paz, vivir en paz, dormir en paz, caminar en paz y tener paz en el corazón, aunque muchas veces es difícil por tantas cosas que suceden a nuestro alrededor, por tantos problemas, quizás enfermedad, un ser querido, una situación complicada, un futuro con poca esperanza, una misma rutina, muchas cosas dan vueltas en nuestra mente y nos llevan a pensar y pensar hasta que perdemos la paz y entramos en el afan y la impaciencia.

Pablo en su carta a los Filipenses les dice que estén firmes, que se regocigen en El Señor, que no estén afanosos, que oren y que sus peticiones sean puestas delante del Señor, para que la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento guarde sus corazones y sus pensamientos en Dios. Entonces seguidamente les da el consejo que hoy quiere El Señor recordar a nuestro corazón para tener paz y es ¿En qué pensamos??

El Apostol Pablo da una lista de las cosas en las que debemos pensar, porque Dios sabe que nuestra mente siempre está ocupada y depende de lo que haya en ella así será nuestra actitud ante la vida, llena de paz o llena de preocupación.

Por eso debemos pensar en todo lo que es verdadero, si las cosas no han ocurrido, no hagamos cuadros de dolor, de pérdida o demos finales tristes a nuestras situaciones, pensemos en lo que es verdadero y no en lo que nos llena de temor. Pensemos en todo lo honesto, las cosas rectas, en la transparencia en nuestra forma de conducirnos y en el respaldo de Dios si hemos hecho las cosas bien. Pensar en todo lo que es justo, es pensar en no cometer injusticia, haciendo lo correcto para cada uno y para nosotros mismos, pensar en lo puro, es pensar en aquello que no se contamina ni se mezcla con cosas malas, todo lo amable, lo que es de  buen nombre, en las virtudes o cosas positivas, si hay algo que sea digno de alabanza en estas cosas debemos pensar, nunca llenar nuestra cabeza de todo lo contrario, porque entonces entraremos en afan, en ansiedad, temores ocultos y terminaremos perdiendo no solo la paz, sino tambien nuestra fe. 

Cuando estamos solos en qué pensamos? Deja que hoy la paz de Dios inunde de esperanza tu corazón, pide al Señor que saque de tu mente todas aquellas cosas que no sean verdaderas, justas, honestas, positivas, recuerda todas las cosas buenas que Dios ha hecho contigo, recuerda cómo ha resuelto uno y otro problema, recuerda sus maravillas y los testimonios de otros hermanos que también han salido victoriosos de pruebas y tribulaciones.

Piensa en Jesús, que venció a la muerte y nos ha dado Su victoria, piensa en Su amor incomparable y en Su poder inigualable y entonces El Dios de paz estará contigo y tus pensamientos serán para bien y no para mal. Piensa solo en lo que Dios ha hecho por ti! 


Llena nuestra mente Señor de cosas verdaderas, justas, honestas, amables, llénala de recuerdos victoriosos y de momentos en los que vimos tu mano peleando por nosotros, llena de paz nuestro corazón y que nuestra mente solo piense lo que tu has hecho por nosotros! Amén!

jueves, 23 de enero de 2020

PERSEVERAR HASTA EL FINAL


"No tenga tu corazón envidia de los pecadores,
Antes persevera en el temor de Jehová todo el tiempo"
Proverbios 23:17

Hace varios años aprendí a conocer una faceta de Dios que no conocía, hasta ese día había conocido un Dios que todo lo concebía, que respondía mis peticiones como yo lo esperaba y confiaba en Él siempre. Pero una noticia inesperada sacó a la luz que mi hijo más pequeño padecía un tumor incurable y aunque se hicieran muchos esfuerzos clínicos, las esperanzas de vida eran imposibles. En ese momento vino un choque de sentimientos, emociones y pensamientos al corazón, diciendo: ¿Confías en mí una vez más? En ese momento en el que no se puede hacer algo humanamente para salvar a quien amas, debía decidir persevero o me rindo, persevero o me aparto.  He recibido tantas bendiciones del Señor y ahora no voy a recibir algo tan difícil y de tanto sufrimiento??

Acepté perseverar, entregué toda mi fe y mi esperanza al Dios todopoderoso que me había dado un niño precioso, pero que también podía tomarlo porque era suyo. Y fue así como después de 23 meses de ese diagnóstico nuestro niño se fue al cielo y goza de la presencia del Señor desde ese día; nuestro corazón de padres se dolió terriblemente y todavía se duele, pero mi corazón de hija de Dios está feliz y confiado, porque nuestro hijo está en el mejor lugar, está con Jesús y de allí nadie lo puede apartar, he perseverado en el temor de Jehová todo el tiempo y anhelo con todo el corazón hacerlo hasta el último día de mi vida.

Ser perseverante no es lo mismo que ser temporal, perseverar conlleva un sacrificio, un esfuerzo, una constancia día a día, noche tras noche, tiempo tras tiempo. Perseverar en el temor del Señor implica hacerlo en tiempos de abundancia y en tiempos de escasez, perseverar en tiempos de guerra y en tiempos de paz, perseverar aunque todo parezca contrario y perseverar cuando todo es bendición, perseverar cuando Dios da y perseverar cuando Dios quita.

A veces viene a  nuestra mente el conflicto y pensamos,  por qué el sufrimiento, por qué otros no pasan lo que yo paso, y hasta podemos tener envidia de los que hacen mal y nada les pasa, pero no importa lo que pase a otros, yo tengo que perseverar como dice la palabra, y perseverar hasta el final. 

No importa la condición y el tiempo que estamos viviendo, perseveremos en el temor de Jehová, confiemos a Él nuestra vida, tiempo y voluntad, es el mayor acto de amor que podemos darle, una vida confiada en Él sabiendo que  no se equivoca y todo absolutamente todo está sucediendo con un propósito. Elijamos perseverar hasta el final, si Dios nos dice que perseveremos es porque Él tiene una recompensa para nosotros para el final, no la perdamos, perseveremos!

Elije perseverar HASTA EL FINAL!

miércoles, 22 de enero de 2020

PEDIR, BUSCAR Y LLAMAR

Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. Mateo 7:7-8

Pedir, buscar y llamar son tres palabras que nos hablan de una necesidad que necesita ser suplida, cuando pedimos algo es porque hay una petición ante alguna situación en la que no podemos hacer nada por nosotros mismos, cuando buscamos algo es porque lo necesitamos y queremos encontrar la respuesta, la solución o la salida y cuando llamamos a una puerta es porque necesitamos que se abra y que nos permita llegar hasta aquello que queremos o deseamos. 

Cuando Jesús habla de la oración con sus discipulos les dice con toda certeza: PEDID y se os dará, BUSCAD y hallaréis, LLAMAD y se os abrirá, hay una acción antes de una respuesta, el problema es que muchas veces nos cuesta tanto orar y pedir al Señor su intervención en nuetras vidas, otras veces nos cansamos de pedir por las mismas peticiones y dejamos las cosas de lado, esperamos soluciones pero no las pedimos, queremos respuestas pero no las buscamos, deseamos que se abran puertas pero no llamamos, la vida fácil no es digna de un verdadero hijo de Dios.

Una cosa es la fe y la certeza de saber que Dios responderá en Su perfecto tiempo y en Su momento y otra cosa es dejar de orar, dejar de pedir, buscar y llamar, dejar de clamar al corazón de Dios para que conceda lo que hemos pedido, para que se abra aquella puerta que tanto necesitamos que se abra. No podemos dejar de orar!

¿A quién pedimos? ¿Donde buscamos? ¿Qué puerta tocamos? Nos cansamos en nuestras propias fuerzas porque vamos al lugar equivocado, ponemos nuestra confianza en nosotros mismos o en los hombres, queremos que las cosas sucedan pero no vamos a la única fuente de ayuda, a quien puede resolverlo todo y darnos todas las respuestas, no vamos a Aquel que tiene la llave que abre todas las puertas, nuestro Señor Jesús, no hay otro camino.

Hoy el consejo para ti y para mi es ir a los pies de Jesús de nuevo, una y otra vez, las veces que haga falta, porque solo en Él  se encuentra la clave, la solución y la respuesta para cualquiera que sea nuestra petición.

Pide al Señor, busca a Jesús, llama  y clama a Él, porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abre, solo Jesús el autor y consumador de nuestra fe puede darnos ese pronto auxilio que tanto necesita nuestro corazón.

Gracias Señor porque una vez mas reconocemos que fuera de ti nada somos, nada logramos, nada tenemos, ayúdanos Señor que nunca nos cansemos de ir a ti, que no nos cansemos de pedirte,  buscarte y llamarte, tu eres Jesús nuestra única fuente de vida, lo dejamos todo en tus manos y esperamos tu respuesta confiadamente, descansamos  en ti y en tu perfecta voluntad! Amén! 

domingo, 19 de enero de 2020

COMO LIRIOS DEL CAMPO




Pues si no podéis ni aun lo que es menos, ¿por qué os afanáis por lo demás? Considerad los lirios, cómo crecen; no trabajan, ni hilan; mas os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió como uno de ellos. Y si así viste Dios la hierba que hoy está en el campo, y mañana es echada al horno, ¿cuánto más a vosotros, hombres de poca fe?
Lucas 12:26-28

Los lirios son flores que crecen en los campos son muy adaptables y avenibles, porque pueden vivir, tanto en las montañas como en los valles y pantanos, soportan altas temperaturas y también el frío porque son flores resistentes,  pero lo más importante es que no importa las condiciones en las que crezca  su belleza sigue siendo la misma su colorido y  textura.

Hablando del afán  Jesús puso  a sus discípulos como ejemplo a los lirios del campo, y les menciona cómo  crecen, no hilan, no trabajan y Dios los viste y si Dios así viste la hierba que hoy está en el campo y mañana es echada al horno, ejemplificando el poco valor que tiene, cuánto más no cuidará de nosotros.

Por qué nos afanamos tanto entonces? Realmente lo más malo  del afán es que mantiene nuestra mente ocupada, debilita nuestras fuerzas, cambia nuestro estado de ánimo, roba nuestro tiempo,  la fe y la esperanza.

No sabemos que traerá el mañana para cada uno de nosotros, pero si podemos estar seguros que si Dios está a nuestro lado se ocupará de nuestra vida, El nos ama, dio su vida por cada uno de nosotros, entregó a su único hijo para que fuéramos salvos, Dios nos ha dado suficientes pruebas de Su amor, no podemos dejar que el afán de apodere de nuestro corazón y tome el lugar que a Dios le corresponde.

No seamos hombres o mujeres de poca fe, El cuida de nosotros día y noche, seamos cómo lirios del campo que crece y florece esperando de Dios su esplendor y belleza!


miércoles, 15 de enero de 2020

MIS OJOS PUESTOS EN JESÚS LO CAMBIAN TODO!


"Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios".
Hebreos 12:2


Viajando el otro día en tren observaba tantas personas ir y venir, movilizándose de un lado a otro sin problema entre tanta multitud, otros viendo sus teléfonos móviles, leyendo libros, viendo la hora, buscando el nombre de la estación o simplemente viendo el paisaje por la ventana, todo esto era posible porque todos podían ver, sus ojos estaban sanos, no había ningua ceguera.  Todo esto me ha llevado a reflexionar, qué importantes! son nuestros ojos para tantas cosas en el día, para no extraviarnos, para no vivir en tinieblas, para llegar a un destino, para disfrutar del camino y para saber en dónde estamos y a dónde vamos.

Cómo están tus ojos espirituales? La palabra de Dios en muchos momentos habla de nuestros ojos naturales, pero también de nuestros ojos espirituales, ya que cuando nuestros ojos en lo natural no están bien, todo nuestro entorno cambia y necesitamos ayuda, de la misma forma si nuestros ojos espirituales están empañados, cegados o enfermos va a ser muy dificil que podamos ver la mano de Dios en todo.

Necesitamos poner nuestros ojos en Jesús para poder ver a través de él las cosas y no a través de lo que nuestros ojos pueden ver, a través de Jesús podemos ver las soluciones para las cosas imposibles, a través de Jesús podemos ver la sanidad para toda enfermedad, puestos los ojos en Jesús podemos la luz en medio de la oscuridad, la salida en medio de la prueba y la aflicción, poner los ojos en Jesús es traer luz a nuestra forma de ver la vida.

Cuando ponemos los ojos en Jesús, veremos con perdón al que nos ha ofendido, veremos con paciencia a quien nos cuesta entender, veremos con ternura a quien nos cuesta amar, veremos con dulzura a que nos da amargura, veremos con esperanza a quien pensabamos que no tenía solución... mis  ojos puestos en Jesús lo cambian todo!

"Fijemos nuestra mirada en Jesús, pues de él procede nuestra fe y él es quien la perfecciona. Jesús soportó la cruz, sin hacer caso de lo vergonzoso de esa muerte, porque sabía que después del sufrimiento tendría gozo y alegría; y se sentó a la derecha del trono de Dios."  Hebreos 12:2 version Dios Habla Hoy.  

Poner la mirada en Jesús nos llena el corazón de esperanza!

Señor pongo mis ojos en ti, abre mis ojos espirituales para ver tus maravillas, para ver todo  a través de ti, para que mis ojos siempre tengan tu luz, pongo mi mirada en ti!

jueves, 9 de enero de 2020

MIS FUERZAS ESTÁN EN TI!

¡Cuán felices son los que hallan fuerzas en ti,
los que ponen su corazón en tus caminos!
 Cuando cruzan por el valle de las lágrimas,
cambian su aridez en un manantial
al llenar la lluvia los estanques.
Salmos 84:5-6

La palabra de Dios nos habla muchas veces de pasar por valles, valles de sombra de muerte, valles de lágrimas, valles desiertos, valles de decisiones. En las escrituras no dice que nunca pasaremos por esos valles, pero si dice que mientras pasamos por esos valles El Señor estará a nuestro lado. En el Salmo 84 dice que el valle de lágrimas se cambiará en una fuente. Los valles de lágrimas es cuando caminamos por tiempos de mucho sufrimiento y de dolor y El Señor puede cambiarlos en tiempos más fáciles de llevar y en vez de ser de desierto serán como una fuente donde abunde en nosotros su fuerza y su bendición.

Tres veces dichoso el hombre que pone en El Señor sus fuerzas, cuando la palabra de Dios habla de fuerzas no necesariamente habla de la fuerza física… Todos hemos vivido alguna vez situaciones en que la fuerza interior parece terminarse, momentos en los que si la gracia y el poder de Dios no obra sobre nosotros es imposible levantarse y continuar, sin embargo la escritura dice que es tres veces dichoso el hombre que no depende de sus propias fuerzas sino que pone en Dios sus fortaleza, es como el que se apoya sobre una roca para levantarse, por mucha presión o fuerza que eche esa roca no se hundirá , ni se quebrantará, así es El Señor siempre dispuesto a levantarnos, a sostenernos y a llevarnos de Su mano en tiempos de adversidad y cambiará nuestros valles de lagrimas en fuentes que traerán agua de vida. 

No es fácil pasar por un valle de lágrimas, duele tanto el corazón algunas veces y nos sentimos impotentes y sin fuerzas suficientes para continuar, pero aquellos que tienen en El Señor sus fuerzas pasarán por ese valle de lágrimas y no será solo dolor y sequedad porque Dios lo transformará en un manantial, El Señor permitirá que todo el sufrimiento sea para bendición y para bien de los que le aman.

La escritura continúa diciendo irán de victoria en victoria hasta llegar a ver al Señor, así es nuestra vida, si vamos de victoria en victoria es porque vamos de batalla en batalla, guerra tras guerra, prueba tras prueba, dificultad tras dificultad, pero con la promesa que de todas saldremos vencedores hasta llegar a estar con El Señor en la eternidad donde todo el sufrimiento termine y estemos para siempre con Él, gloria a Dios! 

Señor Jesús toma mi vida y todas aquellas cosas en las que humanamente no puedo hacer nada, pongo sobre ti mi carga porque mis fuerzas no son suficientes, me canso en el camino y necesito tu ayuda, tu intervención, tu pronto auxilio. Pongo mis fuerzas en ti, me apoyo en ti, descanso en ti Señor, cambia mi valle de lágrimas en un manantial de agua viva, que el tiempo de sufrimiento sea para bendición y que nuestras fuerzas siempre estén puestas en ti. Se que iré de victoria en victoria, porque tu estás conmigo porque tu me haces más que vencedor y nunca me abandonas. Amén!

miércoles, 8 de enero de 2020

QUIERO ABORRECER LO MALO!


"El temor de Jehová es aborrecer el mal;
La soberbia y la arrogancia, el mal camino,
Y la boca perversa, aborrezco."
Proverbios 8:13

No es muy frecuente utilizar la palabra "aborrecer", cuando nos referimos a situaciones que forman parte de nuestra vida diaria, ya que cuando aborrecemos algo sentimos rechazo, aversión y repugnancia, aborrecer viene del latín abhorrecere que significa alejarse y sentir horror hacia algo.

Piensa por un momento qué provoca todos estos sentimientos y sensaciones en ti que puedas sentir al mismo tiempo rechazo, aversión, repugnancia y hasta horror??? La escritura nos habla de 4 cosas que debemos aborrecer si tenemos temor de Jehová en nuestro corazón:
Aborrecer el mal, la soberbia y la arrogancia, el mal camino y la boca perversa.

Aborrecer el mal es rechazar las cosas que no son buenas, sencillamente, todo lo que no es puro, todo lo que no merece honra, todo lo que es vano y tiene maldad, lo debe aborrecer nuestro corazón.

Aborrecer la soberbia y la arrogancia, es rechazar y sentir hasta repugnancia por sentirse superior a otros o que tú eres más que cualquiera, sentir desprecio hacia los demás y considerarlos menos que nosotros mismos, todos estos sentimientos y actitudes debe aborrecerlas nuestra alma.

Aborrecer el mal camino, todo lo que no conduce hacia la rectitud, la santidad, la fe, el amor y la justicia, aborrecer los caminos de perversidad, los caminos que no nos llevan hacia adelante sino que nos hunden en ellos, debemos rechazar y hasta sentir horror de caminar en malos caminos.

Y por último debemos aborrecer la boca perversa, la boca que hace daño, que tiene maldad, que causa un mal intencionadamente, debemos sentir aversión y aborrecer hablar mal de otros, mal-decir con nuestros labios, hablar mentira y falsedad, criticar y destruir con nuestras palabras.

Aborreces todas estas cosas que dice la palabra? La escritura dice que debemos aborrecerlas, que no debemos acercarnos a ellas, mucho menos practicarlas y que sean parte de nuestro caminar.

Señor enséñanos a ser sabios!

viernes, 3 de enero de 2020

GUARDA MIS OÍDOS CON SABIDURÍA

"Aplica tu corazón a la enseñanza, 
Y tus oídos a las palabras de sabiduría." 
Proverbios 23:12

Ser sabios, buscar sabiduría, debería ser una de las primeras prioridades y peticiones que debemos hacer al Señor al iniciar este año nuevo 2020, por eso es importante vigilar qué oímos, que escuchamos, qué vemos, qué pensamos, qué hablamos y todo es importante para alcanzar esa sabiduría que viene de Dios para que nuestra vida prospere y nos vaya bien.

La escritura dice que apliquemos nuestros oídos a las palabras de sabiduría, por qué son importantes nuestros oidos?

Nuestros oídos son una puerta abierta a nuestro interior, a través del oído entra la palabra de Dios, pero hay muchas fuentes también de contaminación que pueden dañar nuestro corazón, desanimarnos y entorpecer la obra de Dios en nosotros. 

Hablando de forma natural el oído nos ayuda a hacer 4 funciones importantes: 
Nos hace saber las cosas antes que podamos verlas, la fe viene por el oír, aunque no veamos las cosas por nuestro oído las podemos conocer. 

El oído también es importante porque si no oímos no podemos hablar, lo que entra por nuestro oído nos ayudará a poner palabras en nuestra boca, si lo que escuchamos es de bendición podremos hablar también bendición, de lo contrario no saldrán buenas cosas por nuestra boca. 

También el oído nos sirve para mantener el equilibrio de nuestro cuerpo, asimismo espiritualmente las frases, palabras, comentarios que entran por nuestro oído pueden darnos estabilidad o desequilibrarnos teniendo altibajos en nuestro diario caminar. 

Y por ultimo otra función importante del oído, es que a través de él podemos conocer la distancia cercana o lejana de lo que sucede en nuestro entorno, el oído nos da dirección muchas veces tomamos decisiones para nuestra vida a través de lo que hemos escuchado y en base a eso caminamos y nos movemos. 

Como vemos cada función del oído de forma natural es importante y también debemos velar por nuestros oídos espirituales para alcanzar sabiduría. Por eso es importante pedir al Señor que hoy guarde nuestros oídos y seamos sabios aprendiendo a escuchar mejor y filtrar todo lo que recibimos a través de ellos.

Señor este día pongo en tus manos mis oídos, te pido que pongas guarda a mis oídos y pueda cuidar de todo lo que escucho, ya que lo que viene de fuera puede robarme la fe, la estabilidad, puede avisarme del mal y también así mismo con mis labios repetiré lo que mis oídos escuchen. Guarda mis oídos Señor!!

jueves, 2 de enero de 2020

ATESORANDO TU PALABRA EN MI CORAZÓN!

"Si como a la plata la buscares,
Y la escudriñares como a tesoros"
Proverbios 2:4

Cuando algo vale mucho para nosotros nos esforzamos en tratar de conseguirlo, pagamos un alto precio por tenerlo y cuando lo logramos lo tenemos como un tesoro que no queremos que nadie nos lo arrebate. De esta manera la palabra de Dios nos dice que debemos buscar la sabiduría, buscarla como a la plata, como el que busca un metal muy preciado, fino y que anhelamos tener. Y escudriñarla como a tesoros, no solamente desear tenerla sino también estudiarla, meditar en ella, examinándola con mucha atención y con detalle.

Estamos comenzando un año nuevo 2020, nuevo año, nueva década, hasta hace poco hablábamos de los maravillosos años 20 hablando de 1920 porque en esos  Felices Años 20 fue un periodo de prosperidad económica que tuvo Estados Unidos, pero hoy estamos en los años 20 pero no del siglo XX sino del sigo XXI, han pasado 100 años, se dice pronto pero han pasado varias generaciones en medio de un siglo y hoy estamos aqui por la gracia de Dios y necesitamos Su sabiduría para poder conducirnos, para no equivocarnos y cometer los mismos errores de años anteriores, para saber que decisiones tomar, cómo resolver, cómo enfrentar cada día, necesitamos de Dios sabiduría.

Cómo podemos llegar a ser sabios? Solamente leyendo la palabra de Dios, leyéndola y atesorándola en nuestro corazón, leerla y meditar en ella, escudriñarla viendo qué significa cada cosa que Dios quiere decirnos, tratar de entenderla y siempre hablando con El Señor para que Él abra la puerta de nuestro entendimiento para poder comprender, guardar y aplicar su palabra en cada área de nuestra vida.

 No perdamos la oportunidad de instruirnos y ser un poco más sabios cada día. Propongamos en nuestro corazón que este año no pase un solo día sin escudriñar Su palabra y atesorarla como algo  muy preciado!


Digámosle al Señor este año 2020 Señor Anhelo conocer tu palabra, deseo con todo el corazón que me instruyas y me enseñes, dame sabiduría y hazme entender!