viernes, 26 de mayo de 2017

SIEMPRE HACIA ADELANTE!



“Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma. Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.”
Hebreos 10:38-39

La fe es algo sobrenatural, cuando podemos ver, sentir, oír o percibir algo ya no es fe, porque la fe es algo completamente fuera de lo normal para toda lógica humana. Fe es certeza, algo que es completamente seguro, cierto y preciso. Fe es convicción, es el convencimiento de algo en la razón y el corazón. Fe es un don y un fruto que Dios nos da para que toda nuestra vida en El tenga sentido, sin fe sencillamente no podemos agradar a Dios. 

La fe nos da esperanza, nos da la seguridad que algo que esperamos llegará aunque nuestros ojos no puedan verlo, la fe nos ayuda a ir por caminos de luz y vida pero también nos ayuda a ir por caminos tomentosos y oscuros. Fe es confianza y descanso en Dios. Es absolutamente ilógico esperar y descansar cuando estamos más presionados, inquietos y ansiosos, esto solo puede lograrse por medio de la fe.

La fe como fruto se desarrolla en mí y muestra otra cualidad en un cristiano auténtico, el fruto de la fe es una característica de un hijo de Dios, ya que confía plenamente en Su padre y no se desespera ante las situaciones de la vida.

La palabra dice que justo no vive por lo que come o bebe, no vive por lo que tiene y guarda, no vive por lo que mira con sus ojos o posee, el justo vive por fe, solo creyendo y avanzando, la fe nos hace avanzar y nunca retroceder.

Pidamos fe al Señor, cultivemos el fruto de la fe en nosotros, vivamos por fe y caminemos hacia adelante!

Señor aumenta nuestra fe, que podamos esperar en ti ayúdanos a no retroceder ni siquiera con nuestros pensamientos, que hoy nos llenes de esperanza, seguros que algo bueno va a pasar porque Tu estás de nuestro lado, ayúdanos a escoger caminar por el camino estrecho de la fe y no por el camino ancho de la desconfianza y el temor, hoy escogemos vivir y caminar en Fe, queremos agradarte Señor y alcanzar todas esas promesas que tus nos has dado. Padre llena nuestro corazón de fe aunque nuestra lógica no lo comprenda, ni lo entienda, caminamos sin ver, solo creyendo en que Tu eres nuestro Dios, esperamos y descansamos en ti. Amen!