"Bueno me es haber sido humillado,
Para que aprenda tus estatutos."
Salmo 119:71
En diversos pasajes de la palabra de Dios podemos encontrar que la forma de ver la vida es muy diferente a lo que el mundo nos enseña:
Para vivir hay que morir...
El que quiera salvar su vida la perderá
El mayor entre nosotros debe ser el servidor...
Ama a tus enemigos...
Bendice a los que te maldicen...
Haz bien a quien te aborrece...
Ora por quien te hace daño y te persigue...
Al que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos...
El que reparte le es añadido más
El que retiene mas de lo que es justo viene a pobreza...
El que retiene mas de lo que es justo viene a pobreza...
Será que la lógica de Dios no tiene nada que ver con nuestra lógica??? Seguramente que es así, Dios no piensa igual que nosotros, podemos enumerar listas y listas de versos bíblicos donde podemos ver que El Señor mira las cosas de una manera diferente a la nuestra y que sus pensamientos no son los nuestros, ni sus caminos nuestros caminos.
Por esta razón la escritura dice BUENO ME ES HABER SIDO HUMILLADO, la palabra humillar significa herir el amor propio, sentir vergüenza, ser puesto en evidencia, es sentirse inferior, con el orgullo abatido y sin altivez. A nadie le gusta ser humillado, quién puede pensar que esto es bueno?? Para El Señor si es bueno hacernos pasar por el valle de la humillación, donde debemos obligadamente bajar la cabeza, rendir nuestra voluntad y reconocer que algo no está bien. Pero en ese valle no estamos solos Dios está con nosotros y a través de ese proceso logrará que aprendamos sus estatutos, sus leyes, lo que es bueno para nosotros, de otra forma no podríamos aprender, porque la arrogancia, la altivez y el orgullo taponan nuestros oídos, cierran nuestros ojos y no nos permiten ser enseñados por nuestro Padre.
Ser humillado por Dios no es lo mismo que ser humillado por los hombres, Dios nos ama y si ve que es necesario hacernos pasar por humillación lo hará sin destruirnos, sacará lo mejor que hay en nosotros y nos dará una promesa de restauración, El no nos dejará para siempre abatidos y derribados. La forma en la que Dios permite la humillación en nosotros quita la arrogancia y la altivez en nuestra forma de ser, podemos sentirnos impotentes o incapaces, hasta sin fuerzas, pero este tiempo nos ayudará a reconocer que necesitamos parar en nuestros caminos, revisar nuestras actitudes y buscar la solución entendiendo que algo estamos haciendo mal.
Estás pasando por el valle de la humillación? Has sido puesto en evidencia?? está permitiendo Dios abatir tu orgullo y tu altivez?? Hay buenas noticias, BUENO ES PARA TI! Porque después te será más fácil entender su palabra, encontrar lo que estás haciendo mal y enderezar el camino para alinearte a su perfecta voluntad.
Lo que es bueno para Dios es bueno para mi!
Pasar por el valle de la humillación no es fácil Señor, necesito que quites de mi la altivez, la arrogancia y todas aquellas cosas que no me permiten entender tus caminos y hacer tu voluntad. Hoy rindo mi vida al completo delante de ti, bueno me es ser humillado por ti, porque me amas, porque este proceso no me destruirá sino que sacará lo mejor de mi y me ayudará a entender tu palabra y conocer tu voluntad. Solo te pido que me des paciencia, fortaleza y fe para pasar por este valle y que llenes mi corazón de esperanza, porque bueno es para mi y si tu lo dices yo lo creo y así será. Amén!