sábado, 22 de febrero de 2020

CONTIGO ESTOY SEGURO!



"Tendrás confianza, porque hay esperanza; mirarás alrededor, y dormirás seguro." 

Job 11:18

Hay una frase que circula por las redes sociales que dice "No hay almohada más cómoda que una conciencia tranquila", y es una gran verdad, la inseguridad muchas veces no viene de factores externos que nos atormentan, muchas veces la inseguridad puede venir de nuestras malas decisiones y de nuestro mal proceder. 


Es por esa razón que debemos velar y cuidar nuestro caminar, nuestra forma de hacer las cosas, lo que sembramos cosecharemos y en nosotros está el evitar este tipo de inseguridad. 

La escritura dice en el libro de Job 11:18 "Tendrás confianza, porque hay esperanza; mirarás alrededor, y dormirás seguro." Esta es una promesa que leemos separada de los pasajes anteriores que son fundamentales para que esta promesa pueda cumplirse, en el libro de Job 11:13-14 dice "Si tú dispusieres tu corazón, Y extendieres a él tus manos; Si alguna iniquidad hubiere en tu mano, y la echares de ti, Y no consintieres que more en tu casa la injusticia". 

Estas son las condiciones para vivir seguros haciendo la parte que nos toca. Disponer el corazón hacia El Señor y depender de Él, apartar la iniquidad, echarla fuera de nosotros y no permitir la injusticia, entonces si tendremos confianza y miraremos alrededor y dormiremos seguros. 

La verdadera tranquilidad viene de un caminar que se aparta y evita a toda costa todo aquello que abre la puerta al enemigo. Sacar la iniquidad de nosotros es desechar toda maldad, toda cosa que no agrada al Señor y que puede estar haciendo mella en nuestro corazón apartándonos poco a poco de Su voluntad y sus propósitos para nuestra vida.

Pidamos al Señor que limpie nuestro corazón y cerremos toda puerta al enemigo para que podamos tener confianza, llenarnos de esperanza, mirar alrededor y dormir seguros.

Señor entregamos a ti toda área de nuestra vida en la que podemos estar fallando y dejando de hacer tu voluntad, quita de nosotros toda maldad, toda iniquidad y toda injusticia, abre nuestro ojos para siempre caminar por el camino recto y hacer tu voluntad aun por encima de nuestros deseos. Cerramos hoy toda puerta al enemigo y disponemos nuestro corazón para hacer lo recto agradable delante de ti Señor. Amén!