viernes, 10 de noviembre de 2017

TUYOS SON SEÑOR!


"Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos."
1 Crónicas 29:14


Todo es del Señor, nuestras vidas y nuestras familias, nuestras habilidades y capacidades El nos la ha dado, nuestros talentos, nuestros bienes materiales, nuestro cuerpo, nuestra voz, todo le pertenece a Él y nuestros hijos también son suyos.

Durante 7 días hemos estado hablado acerca de lo importante que es orar por nuestros hijos, ya que es el tiempos más valioso que podemos dedicarles como padres, el tiempo de oración que reservamos para orar por nuestros hijos no es un tiempo muerto o perdido, es un tiempo invertido en sus vidas, en el presente, en el futuro y hasta la eternidad.

Jesús oró por sus discípulos antes de  que fuera apresado, tenía la carga en su corazón de entregarlos al padre, de interceder por ellos para que ninguno de ellos se perdiera y fueran los hombres de fe y que llegaron a ser.  Nosotros también podemos tomar el ejemplo de Jesús y orar por nuestros hijos clamando siempre cosas básicas para que su vida sea bendecida y para que lleguen a ser los hombres y las mujeres que Dios ha planeado que fueran y que nada ni nadie los aparte del camino. 

Recordemos pedir siempre al Señor:

1. Que te conozcan a ti Señor para que tenga vida eterna!

2. Que los guardes del mal para que nada  los dañe y puedan ser librados de toda maldad de los hombres y del mundo. 

3. Santifícalos en tu verdad, que puedan ser apartados para ti, que sean guardados para tu servicio, apartados y separados para ti Señor

4. Que sean uno en ti, para que haya unidad contigo y que puedan ser íntegros, que su haya unidad en la forma que piensa, hablan y actúan. 

5. Que vean tu gloria, que vean tu mano en cada cosa que hagan y en cada paso que den, que tengan esa experiencia viva contigo y vean tu gloria en todo lugar aquí en la tierra y  también que un día vean tu gloria en la eternidad. 

6. Que tu amor esté en ellos, para que puedan estar seguros, firmes y puedan sentirse amados, valorados, apreciados y con un corazón lleno de compasión por demás.

7. Mayores cosas harán, declaramos que nuestros hijos harán obras mayores que las que nosotros hemos hecho, que harán grandes cosas en el reino de Dios y serán siervos y mujeres de Dios que extenderán su reino y que se cumpla el propósito por el cual han venido a esta tierra. 

Porque todo es tuyo Señor y de lo recibido de tu mano te damos, entregamos a ti a nuestros hijos, bendícelos, llénalos de tu presencia, guárdalos, que nada ni nadie los arrebate de tu mano,  en tus manos están, TUYOS SON SEÑOR!!!