miércoles, 9 de agosto de 2017

APRUEBA MI CORAZÓN!


"Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad."

2 Timoteo 2:15

Los años de estudios en el colegio pasan muy rápido, recordamos cuando llegaba el momento de recibir las calificaciones de cada período de evaluación, siempre venía la sensación de preocupación por saber cuál había sido nuestra nota, si habíamos sido aprobados o reprobados del curso.  Luego al ser padres también esperamos ese mismo proceso, pero del otro lado de la orilla, ya no esperando nuestra propia evaluación sino la de nuestros hijos,  al final volvemos a sentir esa misma preocupación pensando será que mi niño fue aprobado, fue buen estudiante, aprobó o reprobó el año? Qué alegría más grande recibir esas palabras del profesor cuando nos dice que todo ha ido bien y que ha ganado el curso y puede pasar al siguiente!


Nosotros como cristianos también habla la palabra que llega el momento de evaluación en nuestra vida, las tan conocidas como pruebas. Quién no ha enfrentado, está enfrentando o vive siempre siendo probado? Probados en nuestro carácter, probados en nuestras actitudes, probados con nuestra familia, con nuestro trabajo, en nuestra salud, en nuestras relaciones, en nuestro corazón, siempre vamos siendo probados. Constantemente estamos pasando por esos procesos que nos ayudan a poder ir creciendo en nuestra vida como cristianos y que aunque en el momento algunos son muy difíciles de soportar, nos van llevando a un crecimiento en El Señor y vamos alcanzando victorias que hacen de nuestra vida una aventura poderosa y diferente a lo que el resto del mundo vive.

En la palabra de Dios aparece varias veces la palabra APROBADO y buscando el significado esta palabra, dice el diccionario que es una nota o calificación académica que indica que se llegado al nivel mínimo de conocimientos requeridos, en otras palabras es un suficiente. Cuando somos aprobados por Dios es porque hemos llegado al nivel mínimo de lo que debemos saber para pasar a otro nivel, no es que seamos excelentes, muy buenos o buenos, solamente El quiere que seamos aprobados, que mostremos un mínimo de conocimientos de lo que El nos ha enseñado para poder pasar cada prueba que nos permite vivir, qué alegría más grande podemos provocar en el corazón de Dios cuando ve que no solamente hemos sido aprobados sino que nos merecemos un muy  bueno o un excelente! porque no solamente hemos mostrado lo mínimo sino hemos dado más.

Hermanos Dios prueba nuestros corazones, El quiere que vayamos alcanzando nuevos conocimientos, El quiere sacar lo peor de nosotros no para avergonzarnos, sino para que pueda dar paso a lo mejor que hay en nosotros, un diamante en bruto es valioso, pero más valioso es cuando ha sido tallado una y otra vez, cuando se ha sacado lo peor y se ha dado paso a lo mejor. El en su corazón de Padre anhela que nosotros no seamos siempre los mismos, qué difícil es para un padre enfrentar la pena que un hijo es reprobado de un curso, o que no puede pasar al siguiente nivel; de esa misma forma El Señor quiere que avancemos que no nos estanquemos, que vayamos creciendo en conocimientos, alcanzando victorias y siendo aprobados, pero eso no se logrará nunca sino enfrentamos esas benditas pruebas que permiten sacar lo peor de nosotros para dar paso a algo más excelente.

No te desanimes si hoy estás siendo probado y vives una constante evaluación espiritual, es un proceso de aprendizaje de amor de tu Padre del cielo, queriendo hacer de ti un obrero aprobado que no tiene de qué avergonzarse, El quiere hacer de ti un obrero capaz, diestro, sabio, prudente, un obrero excelente que va enfrentando cada prueba con valentía y no con cobardía, un obrero que anhela ir de victoria en victoria, aunque eso signifique caminar de batalla en batalla. Nunca se ha obtenido una victoria si antes no se ha tenido una batalla o una guerra. No anhelemos solo los premios o gratificaciones, antes debemos pasar por los esfuerzos y las evaluaciones.

Anhela hoy con tu corazón se aprobado por Dios, esfuérzate en todo lo que El te pide, entrega lo mejor de ti mismo, El te llevará al siguiente nivel, El anhela ver tu vida crecer y avanzar, El desea que tu también puedas sentir gozo en el corazón al ver que lo vas logrando poco a poco, recuerda que la alegría de tu corazón al haber ganado una prueba, también provoca un sonrisa en el corazón de tu Padre del Cielo! 

 Quizás nunca pensé decir esto, pero Señor hoy te doy gracias por las pruebas, gracias por cada prueba que permites en mi vida, por cada día de batallas pequeñas y grandes que enfrento día a día, semana a semana, mes tras mes, tu permites todo esto por amor Señor, porque no quieres que sea siempre el mismo, sino anhelas con tu corazón de Padre que sea aprobado y alcance nuevas metas en ti. Solo te pido que me ayudes a poder ser valiente, esforzado y capaz en tus fuerzas para seguir adelante y que nunca tengas que avergonzarte de mi, permite que cada prueba que venga a mi vida saque lo peor de mi y de paso a lo mejor que hay en mi, guíame, enséñame, fortaléceme, camina conmigo y llévame siempre de tu mano, Señor aprueba mi corazón! Amén!