"Sustenta mis pasos en tus caminos,
Para que mis pies no resbalen."
Salmo 17:5
La palabra sustentar significa “hacer que algo se mantenga o permanezca en el mismo estado o condición” también puede significar sostener, sujetar, soportar.
Cuando caminamos por un camino con un paisaje bonito, un buen clima, ligeros de equipaje y una compañía agradable, el camino seguro se nos hace más corto, de pronto vemos que sin darnos cuenta hemos llegado.
Pero en el diario vivir no siempre hay un paisaje bonito porque el camino a veces se torna oscuro y lleno de tormentas, otras veces el camino se hace largo bajo un sol abrazador, otras veces la compañía a lo largo del camino se vuelve difícil de congeniar y otras veces todas la adversidades juntas son parte de nuestro diario caminar, tenemos que tener mucho cuidado porque hay piedras, obstáculos, alturas muy arriba con cuestas difíciles de subir y otras veces profundidades muy grandes donde hasta es difícil sostenernos, también si llevamos una carga fuerte sobre nuestros hombros el camino se hace casi interminable.
Tal vez este tipo de caminos pensaba el rey David cuando escribió este Salmo diciendo SUSTENTA MIS PASOS, necesitamos que El Señor nos ayude a permanecer de la misma forma, al mismo paso, sin hundirnos y sin caernos, no importan si el camino es fácil y bonito o si es adverso y contrario, el hace que nuestros pies no resbalen y no caigan.
Luego dice EN TUS CAMINOS, los caminos de Dios son estrechos, no son anchos y cómodos, muchas veces los caminos del Señor nos llevan al sacrificio, a la entrega por el bien de otros, los caminos para hacer Su perfecta voluntad duelen porque quisiéramos algo contrario, pero El puede SUSTENTAR NUESTROS PIES EN SUS CAMINOS PARA QUE NUESTROS PIES NO RESBALEN. El puede sostenernos, sujetarnos, soportarnos y aún llevarnos de la mano, El puede permitir que sigamos caminando porque va sosteniendo nuestros pasos, no importa el peso que llevemos encima, no importa la carga, Él hace que nuestro paso sea más suave, más llevadero.
Luego dice EN TUS CAMINOS, los caminos de Dios son estrechos, no son anchos y cómodos, muchas veces los caminos del Señor nos llevan al sacrificio, a la entrega por el bien de otros, los caminos para hacer Su perfecta voluntad duelen porque quisiéramos algo contrario, pero El puede SUSTENTAR NUESTROS PIES EN SUS CAMINOS PARA QUE NUESTROS PIES NO RESBALEN. El puede sostenernos, sujetarnos, soportarnos y aún llevarnos de la mano, El puede permitir que sigamos caminando porque va sosteniendo nuestros pasos, no importa el peso que llevemos encima, no importa la carga, Él hace que nuestro paso sea más suave, más llevadero.
Qué consuelo tan grande saber que El está allí sustentando mis pasos, haciendo que mi marcha sea segura y sin caídas!!
Señor sustenta mis pasos, sustenta mi vida y mi caminar no importan como sean, si son bonitos y hermosos o tormentosos y difíciles, llenos de dificultades y tentaciones, llenos de alegrías y dulces sorpresas, Señor susténtame, que mis pies un paso tras otro caminen en pos de ti y apoyados en Tu inmenso amor y Tu asombroso cuidado. Amén!
